Signos de caída de la vejiga

La caída de la vejiga, a veces también llamada vejiga caída o el término médico cistocele, es una afección que afecta a las mujeres. Una pared separa la vejiga y la vagina de una mujer, y cuando la pared se debilita, la vejiga puede caer hacia la vagina. Los factores de riesgo para un cistocele incluyen mujeres que han dado a luz o que han tenido una histerectomía. El envejecimiento es otro factor de riesgo para la caída de la vejiga. Se insta a las mujeres que notan signos de este fenómeno a discutir el problema con sus médicos. El cistocele se mide en grados; el grado 1 es leve, el grado 2 es más grave y el grado 3. avanzado.

Presión pélvica

Una sensación de presión de plenitud en la región pélvica podría ser una señal de que la vejiga de una mujer ha disminuido. La causa de la presión es el peso agregado de la vejiga que se ha introducido en la vagina. La presión puede empeorar mientras está de pie o al esforzarse durante la tos o el estornudo.

Incontinencia por estrés

La caída de la vejiga puede causar la pérdida involuntaria de orina, llamada incontinencia por estrés. La incontinencia por estrés ocurre durante cualquier acto de esfuerzo físico: estornudar, toser, reír, cargar objetos pesados ​​e incluso sexo. Las mujeres que tienen un cistocele moderado también pueden experimentar dolor durante las relaciones sexuales.

Protuberancia del tejido

La aparición de tejido abultado es una señal de que la vejiga ha disminuido, según el Centro Nacional de Información de Enfermedades Renales y Urológicas ( NKUDIC). Una mujer misma puede notar la protrusión de un cistocele de grado 2 o 3 cuando está de pie o sentada. La vejiga puede retirarse cuando está acostada en una posición boca abajo. Los médicos pueden ser capaces de diagnosticar un cistocele solo con el examen cuando la enfermedad ha avanzado.

Infección de la vejiga

Las mujeres que tienen una vejiga caída a menudo experimentan infecciones frecuentes o recurrentes del tracto urinario, según la Clínica Mayo. Lo más probable es que las infecciones recurrentes de vejiga solas no apunten a un cistocele, pero pueden acompañar a otros síntomas de la afección.