La narcolepsia y la dieta cetogénica

La narcolepsia es un trastorno del sistema nervioso central que se asocia con somnolencia diurna, ataques de sueño y falta de control muscular. Los medicamentos de tipo anfetamínico, como el modafinilo, generalmente pueden controlar los síntomas relacionados con el sueño de la narcolepsia. Sin embargo, puede desarrollar una tolerancia a estos medicamentos por lo que ya no funcionan en las dosis anteriores. La investigación sugiere que las dietas bajas en carbohidratos, o cetogénicas, pueden ayudar a controlar la somnolencia diurna y los ataques de sueño.

Narcolepsia

La narcolepsia es una enfermedad crónica que resulta de un defecto en las células cerebrales que producen hipocretina, un neurotransmisor que controla el sueño. La afección puede surgir como resultado de una enfermedad autoinmune, una enfermedad en la que el sistema inmunitario trata a las células cerebrales productoras de hipocretina como invasores extraños. Otras causas incluyen trastornos psicológicos como traumas o estrés. Los síntomas más comunes de la narcolepsia son la somnolencia diurna y los ataques de sueño. Otros síntomas incluyen patrones irregulares de sueño nocturno, falta de control muscular, parálisis muscular y alucinaciones asociadas con quedarse dormido y despertarse.

Tratamiento estándar

La narcolepsia puede ser extremadamente debilitante; También puede provocar accidentes graves si se duerme o pierde el control muscular mientras conduce o camina por las escaleras. El riesgo de accidentes desaparece con el tratamiento adecuado. El tratamiento estándar de la narcolepsia consiste en una combinación de estimulantes como el modafinilo que puede mantenerlo despierto durante el día y medicamentos antidepresivos que pueden prevenir los episodios de debilidad muscular o parálisis. Los estimulantes que se usan para tratar la narcolepsia generalmente no funcionan a largo plazo, porque tiende a volverse tolerante con el tiempo.

Dietas Ketogénicas

R.M. Wilders, M.D., inventó la dieta cetogénica en la década de 1920 como un remedio para las convulsiones epilépticas. La versión original de la dieta cetogénica requiere restringir los carbohidratos de 10 a 15 g por día. La proteína debe mantenerse a 1 g por día por kilogramo de peso corporal; un kilogramo es de aproximadamente 2.2 libras. Esta composición de nutrientes obliga al cuerpo a cambiar el metabolismo de la glucosa al de la grasa, lo que tiene un efecto estabilizador en el cerebro. Las dietas más nuevas, como la dieta Atkins, son modificaciones de la dieta cetogénica original, pero permiten una ingesta ligeramente mayor de carbohidratos y no requieren una restricción de proteínas. A diferencia de la dieta cetogénica original, se utilizan principalmente para perder peso.

Una dieta cetogénica y narcolepsia

Según un estudio publicado en junio de 2004 en la revista Neurology, una dieta baja en carbohidratos puede aliviar En el estudio, nueve pacientes siguieron la dieta Atkins durante ocho semanas. Un paciente no pudo completar el estudio. Los ocho pacientes que completaron el estudio experimentaron significativamente menos somnolencia durante el día, menos ataques de sueño y menos incidentes de parálisis del sueño. Los investigadores sugieren que es posible que la ingesta baja de glucosa en la dieta cetogénica mejore los síntomas de la narcolepsia al activar las neuronas que contienen hipocretina.