Tratamiento del trastorno bipolar con nutrición y dieta

La impulsividad, irritabilidad y excitabilidad asociadas con el trastorno bipolar afectan a casi 2 millones de estadounidenses. Los cambios de humor que van desde episodios maníacos hasta estados depresivos pueden ser emocionalmente paralizantes y físicamente agotadores. Debido a que la dieta y la nutrición juegan un papel importante en este ciclo de inestabilidad, las personas con trastorno bipolar deben tener cuidado con los alimentos que ingieren. Si bien las vitaminas y los minerales solos no reducen los síntomas del trastorno bipolar, complementar la dieta mientras toma medicamentos aumentará los efectos beneficiosos del tratamiento y minimizará los posibles efectos secundarios.

Consuma mayores cantidades de omega 3 ácidos grasos. Estos ácidos se encuentran comúnmente en peces como el arenque, la caballa, el salmón, el atún y la trucha. El aceite de pescado contiene ácido eicosapentaenoico (EPA) y ácido docosahexaenoico (DHA), los cuales reducen los riesgos asociados con enfermedades cardiovasculares y niveles elevados de triglicéridos. La ingestión de aceite de pescado a niveles de 0,5 a 1,8 g por día modula las áreas del cerebro asociadas con el estado de ánimo y el comportamiento, reduciendo así los síntomas del trastorno bipolar, como la depresión. Si eres vegetariano o simplemente no te gusta el pescado, considera tomar suplementos en forma de píldoras o trata de comer nueces, linaza y aceite de canola, todo lo cual aumenta los niveles de omega-3 en el cuerpo.

Limite su ingesta de tiramina y alcohol si actualmente está usando medicamentos psicotrópicos. Los inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO) son potentes antidepresivos que a menudo se recetan a las personas con trastorno bipolar. La tiramina se encuentra en muchos alimentos y puede reaccionar con los IMAO, lo que produce presión arterial alta o baja, diarrea y dolor de cabeza. Los alimentos ricos en tiramina incluyen yogur, hígado, salchichas fermentadas, lentejas, habas, guisantes, plátanos, higos y pasas. Mezclar cualquier tipo de alcohol con IMAO es imprudente. Hacerlo podría empeorar los síntomas bipolares al causar hipertensión o desencadenar un estado maníaco-depresivo.

Use la sal de manera consistente. Una causa primaria del trastorno bipolar es un desequilibrio de sodio en el cerebro. Por esta razón, los médicos a menudo recetan litio, un modulador de sodio. Sin embargo, cuando consume grandes cantidades de sal, o deja de usar sal por completo, el litio en su sistema exacerba este desequilibrio, ya sea haciendo que el medicamento sea ineficaz o elevándolo a niveles tóxicos. Además, la ingesta de sal desequilibrada podría provocar confusión mental, sudoración, fiebre, diarrea, problemas renales y retención de agua. Por lo tanto, sepa cuánta sal ingiere diariamente y mantenga esta cantidad consistente con la dosis de litio recetada para usted.

Evite los alimentos con alto contenido de grasas saturadas. Aunque entre el 70 y el 80 por ciento de los pacientes bipolares responden al litio, deben tomar el medicamento durante varias semanas antes de que sea efectivo. Por este motivo, los medicamentos psicotrópicos de acción rápida como las benzodiazepinas, los antipsicóticos y los antidepresivos se suelen recetar en el ínterin. Un efecto secundario potencial de los antidepresivos es el aumento de peso. Para minimizar esto, evite las comidas altas en grasa y trate de hacer ejercicio regularmente. Coma verduras saludables y carnes magras para reducir los riesgos de obesidad e hipertensión.

Beba agua, leche o jugo de frutas en lugar de bebidas con alto contenido de cafeína. El consumo elevado de cafeína empeora los síntomas del trastorno bipolar y puede desencadenar ataques. Normalmente, cuando alguien con trastorno bipolar se encuentra en un estado depresivo, consumirá niveles más altos de cafeína para elevar su estado de ánimo, lo que puede hacer que la persona se convierta en un estado maníaco al contrarrestar los efectos sedantes de las benzodiazepinas, inhibiendo los patrones normales de sueño, aumentando la ansiedad, Elevando los latidos del corazón e iniciando ataques de pánico. Reduzca el consumo de cafeína reduciendo los chocolates, el café, los refrescos y otros alimentos o bebidas con cafeína.