La talasemia es una enfermedad hereditaria en la cual el cuerpo produce hemoglobina anormal. La hemoglobina se compone de dos subunidades alfa y dos beta. Una deficiencia en cualquiera de los dos tipos es anormal y conduce a talasemia. La hemoglobina alterada se produce dentro de los glóbulos rojos, que luego se destruyen a un ritmo anormalmente frecuente. Dado que los glóbulos rojos utilizan la hemoglobina para transportar oxígeno por todo el cuerpo, un atleta con talasemia se encuentra en una desventaja significativa.

Detección de talasemia en atletas

Un atleta con cualquiera de las formas de talasemia presentará Síntomas de la anemia. Sin embargo, esta anemia no responde a los suplementos de hierro, y si el atleta es evaluado, los niveles de hierro serán normales. Las pruebas de sangre adicionales también revelarán un desequilibrio entre las dos subunidades que componen la hemoglobina.

Talasemias leves compatibles con la actividad deportiva

Algunas talasemias no producen muchos síntomas, si es que los hay. Las personas con alfa o beta-talasemia menor, en las que solo se ve afectado uno de los genes responsables de la producción de hemoglobina, solo pueden mostrar una leve anemia con un ligero cansancio. Las personas con cualquiera de estas talasemias pueden participar en actividades deportivas sin consecuencias graves, previa recomendación de un médico.

Talasemias graves incompatibles con el atletismo

La alfa-talasemia mayor es una forma grave que es incompatible con vida; los fetos suelen morir en el útero. La beta-talasemia (intermedia y mayor) se puede tratar con transfusiones de sangre. Con el tiempo, estas transfusiones hacen que el exceso de hierro se acumule en el cuerpo. La desferrioxamina se administra por vía intravenosa o por vía subcutánea para eliminar el hierro y proteger los órganos del cuerpo contra daños. Las personas con estos tipos de talasemia probablemente no podrán participar en atletismo vigoroso.

Precauciones para atletas con talasemia

Dado que esta enfermedad es genética, no hay manera de eliminarla por completo. Por lo tanto, se deben tomar precauciones para evitar que el atleta sufra complicaciones potencialmente mortales. Los atletas deben ser observados cuidadosamente en todo momento. La hidratación es la principal medida de prevención, especialmente con actividades al aire libre. Aquellos con talasemias severas deben evitar los deportes de contacto y limitar el esfuerzo excesivo. Además, las actividades a gran altitud, incluido el vuelo en cabinas presurizadas, son altamente desalentadoras.