Ajo vs Penicilina

La penicilina es a menudo la primera línea de defensa para tratar una infección bacteriana. Es posible que no considere el ajo como una forma de medicamento, pero la planta tiene potentes agentes antibacterianos que podrían destruir las bacterias de la misma manera que lo hace la penicilina. Una vez que conozca los beneficios e inconvenientes de la penicilina y el ajo, puede hablar con su médico sobre si tiene un lugar en su plan de tratamiento.

Ajo

El ajo se ha usado como un agente antibacteriano y antiséptico para siglos. Las culturas antiguas utilizaban el ajo para tratar la lepra y como tratamiento de coagulación para los caballos. El ajo también se usó como tratamiento para la sordera durante la Edad Media. Las tribus indias americanas utilizaban el ajo para tratar el escorbuto, la flatulencia y los dolores de oído. La inhalación de ajo también se usó como tratamiento para la tuberculosis. Durante la Segunda Guerra Mundial, el ajo fue utilizado como un agente antibacteriano para desinfectar heridas. El compuesto en ajo responsable de sus capacidades antibacterianas se llama alicina, que es un tipo de azufre que limpia y purifica.

Investigación

Los ensayos clínicos indican que el ajo tiene la capacidad de ayudar a tratar ciertas infecciones bacterianas, aunque Su uso es limitado. Un estudio de 2006 en el "Journal of Nutrition" encontró que los suplementos de ajo pueden ayudar a tratar el Helicobacter pylori, una bacteria que puede causar úlceras gástricas. Un estudio de 2001, también publicado en el "Journal of Nutrition", encontró que la infección por Helicobacter pylori y las tasas de cáncer de estómago eran menores entre los pacientes que consumían ajo. El estudio también encontró que el jugo de ajo crudo puede matar las bacterias que causan diarrea, y que el ajo podría ser eficaz para tratar las cepas de bacterias resistentes a los antibióticos tradicionales. Penicilina

La penicilina se usa para tratar una variedad. de infecciones bacterianas. La penicilina actúa erradicando las bacterias causantes de enfermedades e inhibiendo su crecimiento a medida que se recupera. Existen numerosas formas de penicilina, y cada una se usa para tratar ciertas infecciones, pero no todas las formas son efectivas para todas las infecciones bacterianas. La penicilina se usa para tratar infecciones comunes, como una infección de oído o una faringitis estreptocócica, así como infecciones menos comunes, como la gangrena y la fiebre tifoidea. La penicilina solo está disponible en forma de receta.

Consideraciones

Informe a su médico si tiene asma, enfermedad renal, trastornos de la coagulación o cualquier tipo de alergia antes de tomar penicilina. Los efectos secundarios incluyen diarrea, náuseas, vómitos, secreción vaginal, candidiasis bucal, fiebre, escalofríos, moretones con facilidad, erupción y pérdida de conciencia. Informe a su médico si tiene alguno de estos efectos secundarios mientras toma penicilina. El ajo podría ser una alternativa efectiva si experimenta efectos secundarios. Hable con su médico sobre si los suplementos de ajo podrían ser efectivos para su tipo de infección. Si usted es alérgico a la penicilina, su médico le recetará un antibiótico diferente para tratar sus síntomas.