La tos es un reflejo corporal normal que se produce cuando las vías respiratorias están expuestas a un irritante como el polen o la mucosidad. La tos puede ser aguda o crónica y acompañada de fiebre, flema, pérdida de peso involuntaria y sudores nocturnos. A veces su tos puede ser productiva de esputo o sangre. Las enfermedades pulmonares específicas están asociadas con este síntoma.

Bronquitis

Según la Clínica Mayo, la bronquitis se refiere a una inflamación de los tejidos que recubren los tubos bronquiales (parte de las vías respiratorias). Es un tipo de enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) que puede ocurrir durante una o dos semanas o durar más de tres meses. Los síntomas incluyen una tos que produce mucosidad clara, amarilla, gris o verde y dificultad para respirar, especialmente con la actividad física. Otros síntomas incluyen sibilancias, fiebre, escalofríos y cansancio. El acetaminofeno o los supresores de la tos de venta libre pueden ayudar a calmar los síntomas. Un médico también puede recetar antibióticos con receta médica y supresores de la tos si los remedios de venta libre no funcionan. A veces, el simple hecho de usar un humidificador y beber muchos líquidos puede remediar los síntomas de la bronquitis.

Tuberculosis

La tuberculosis (TB) es una enfermedad muy contagiosa causada por la bacteria Mycobacterium tuberculosis. Esta infección se introduce en los pulmones y también se puede diseminar a otras partes de su cuerpo, como la columna vertebral y el cerebro. De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), los síntomas de la TB incluyen una tos grave que produce esputo o sangre que permanece durante tres semanas o más, pérdida de peso, falta de apetito y fiebre. Escalofríos, sudores nocturnos y fatiga también son posibles. Un médico puede prescribir una combinación de medicamentos contra la tuberculosis, como isoniazida, rifampicina, etambutol o pirazinimida. El tratamiento puede durar de dos a siete meses.

Neumonía

La neumonía es una infección bacteriana de los pulmones que causa una tos productiva de moco amarillo, verde o con sangre. De acuerdo con la American Lung Association, otros síntomas incluyen fiebre, escalofríos, dificultad para respirar, dolor de pecho pleurítico (dolor asociado con la respiración y la tos), dolor de cabeza, diaforesis (sudoración), falta de apetito y confusión. Para aliviar la fiebre se recomiendan medicamentos antiinflamatorios no esteroides de venta libre, como ibuprofeno o naproxeno. Un médico también puede prescribir medicamentos antibióticos, como levofloxacina o azitromicina.

Cáncer de pulmón

El cáncer de pulmón es una condición devastadora en la cual los tumores cancerosos crecen en los pulmones y se pueden propagar a diferentes partes del cuerpo. Según el Instituto Nacional del Cáncer, los síntomas del cáncer de pulmón incluyen una tos crónica que produce sangre, dificultad para respirar, ronquera y pérdida de peso involuntaria. Dolor en el pecho, fatiga e infecciones pulmonares como la neumonía también son posibles. Las opciones de tratamiento disponibles incluyen cirugía, quimioterapia, radiación y medicamentos como el dasatinib que se dirige a las células cancerosas del pulmón.