Reacción respiratoria alérgica a los sofás

Las alergias son la quinta causa de enfermedades crónicas en los Estados Unidos, según el sitio web Womens-Healthcare.org. Una reacción alérgica respiratoria puede manifestarse como estornudos, tos, ojos llorosos o dificultad para respirar. Su sofá es un candidato para la causa de sus alergias. Los ácaros del polvo, la caspa de las mascotas y el moho pueden estar en su sofá y ponerlo en riesgo.

Ácaros del polvo

Los ácaros del polvo se encuentran comúnmente en los muebles, afirma MayoClinic.com. Estos pequeños bichos, un pariente de la araña, prosperan en las células de la piel humana, haciendo de su sofá un lugar agradable para vivir. Una reacción alérgica a los ácaros del polvo puede ser el ácaro mismo o las heces. Una reacción leve a un ácaro del polvo puede ser el estornudo o la secreción nasal. Sin embargo, una reacción severa puede resultar en un ataque de asma. Los ácaros del polvo viven en el polvo, para reducir el riesgo de una reacción de ácaros, limpie su sofá con regularidad.

Caspa de mascotas

A las mascotas les encanta descansar en los sofás tanto como a sus dueños. Sin embargo, su mascota puede dejar el pelo, la caspa y hasta la piel en su sofá. Algunos animales pueden dejar la saliva en tu sofá; más comúnmente un gato. Estos pueden ser la fuente de su alergia respiratoria. Para prevenir una reacción alérgica, reduzca el tiempo que sus amigos peludos pasan en su sofá. También puede colocar una sábana o frazada sobre su sofá, que es fácil de lavar y puede reducir los alérgenos que entran a su sofá.

Moho

El moho prospera en la humedad. Si vives en un clima húmedo o en una casa, puedes ser susceptible al moho que crece en tu sofá. El moho no es seguro para inhalar y puede causar una reacción alérgica. Cuando inhala esporas de moho, su cuerpo responde formando anticuerpos para atacar el alérgeno. Parte de esta respuesta implica una reacción respiratoria que puede empeorar con la exposición repetida.

Prevención

La mejor manera de prevenir las alergias desde su sofá es reducir su exposición al polvo, la caspa y el moho. Para combatir los ácaros y la caspa, considere cambiar de un sofá de tela a uno de cuero, madera o plástico. Para reducir la acumulación de moho, controle la humedad dentro de su casa. Mantenga un deshumidificador en funcionamiento y cierre sus ventanas.