Si está vivo, tiene presión arterial y desea que sea fuerte. Necesita poder circular la sangre por todo el cuerpo. Sin él, su cuerpo no puede obtener el oxígeno que necesita para sobrevivir. El problema es que a veces su presión arterial es demasiado alta (su corazón está trabajando demasiado duro) y debe reducirse a un nivel aceptable.

Medir la presión arterial

La presión arterial se mide con dos Números que representan la presión sistólica y la presión diastólica. El número más grande es el número sistólico. Es la presión en sus arterias cuando su corazón late. El número más pequeño es la presión diastólica o la presión en las arterias entre latidos. La unidad de medida para la presión arterial es mm Hg o milímetros de mercurio.

Presión arterial alta

Las lecturas de presión arterial normal deben ser menores a 120/80. Las lecturas de límite alto (prehipertensión) están entre 120-139 /80-89. La presión arterial alta (hipertensión) se considera algo superior a 140/90. Si su presión arterial está en el rango alto, el médico puede recetarle un medicamento.

Tomar el medicamento

Debe tomar el medicamento a diario. Incluso si su presión arterial disminuye o si se siente bien, eso indica que el medicamento está funcionando, no que haya curado su presión arterial alta. No ajuste la dosis por su cuenta. Sólo debe hacerlo el médico. Anote cualquier efecto secundario que sienta e infórmelo al médico. Asegúrese de volver a surtir su receta antes de que se agote.

Modificación de la medicación

Su médico le indicará una dosis baja de la medicación que quiere que tome. Tomar una dosis baja minimiza los efectos secundarios y ayuda a evitar que la presión arterial caiga demasiado rápido. Después de un mes o dos, su médico evaluará el efecto de los medicamentos al controlar su presión arterial.

Si no está funcionando.

Si el medicamento no ha bajado su presión arterial al rango normal, su médico aumente la dosis del medicamento que está tomando, agregue otro medicamento o cambie su medicamento actual por otro diferente. Si el medicamento está mostrando algún efecto, es poco probable que el médico lo cambie. Esa suele ser la opción si no está bajando la presión arterial o los efectos secundarios son demasiado grandes.