Los medicamentos antiinflamatorios y los antihistamínicos son medicamentos que se pueden obtener sin receta y con receta médica. Ambos se usan para aliviar los signos y síntomas de enfermedades, sin embargo, cada medicamento tiene su propio propósito.

Antiinflamatorios

Se usan medicamentos antiinflamatorios, también conocidos como AINE (medicamentos antiinflamatorios no esteroideos) para el alivio del dolor. Los medicamentos antiinflamatorios bloquean los efectos de las enzimas en el cuerpo que crean las prostaglandinas, que son la principal fuente de inflamación y dolor. Cuando se bloquean estas enzimas, el dolor y la hinchazón se reducen en el cuerpo.

Antihistamínicos

Los antihistamínicos se usan generalmente para aliviar o prevenir los síntomas alérgicos y la fiebre del heno. El medicamento previene los efectos de la histamina en el cuerpo que se produce en reacción a los alérgenos. Algunos antihistamínicos se usan para aliviar los síntomas del mareo por movimiento y para reducir la rigidez y los temblores en pacientes con enfermedad de Parkinson. Debido a que los antihistamínicos pueden causar somnolencia, pueden usarse para inducir el sueño en algunos pacientes. Efectos secundarios

Los medicamentos antiinflamatorios pueden causar úlceras, presión arterial alta y reacciones alérgicas cuando se usan con frecuencia o en dosis altas. Los antihistamínicos causan somnolencia en la mayoría de los casos, pero tienen otros efectos secundarios menos comunes y deben ser examinados por un médico si ocurren. Algunos efectos secundarios graves de los antihistamínicos incluyen somnolencia severa, dificultad para respirar, mareos, latidos cardíacos rápidos o irregulares, hinchazón de la cara o lengua y fiebre.