Síntomas del daño del nervio sacro

Comúnmente conocida como "ciática", el daño del nervio sacro es una dolencia tratable y prevenible. La región sacra se encuentra en la parte inferior de la columna vertebral entre el quinto segmento lumbar y el hueso de la cola. El sacro es un canal que tiene cuatro aberturas a través de las cuales corren los vasos sanguíneos y los nervios. Una caída grave o un accidente que resulte en fracturas, histerectomías u otras cirugías, partos, osteoporosis o artritis reumatoide puede causar daño a los nervios sacros, lo que puede ocasionar graves síntomas. Dolor

El dolor por disparos, ardor o apuñalamiento puede Ocurren cuando los nervios sacros están dañados. Este dolor a veces se presenta en un solo lado del cuerpo. El daño a los nervios sacros puede causar dolor que se extiende desde las nalgas hasta los muslos. Para algunos, el dolor es persistente, mientras que para otros, aparece y desaparece. El dolor puede agravarse por períodos prolongados de estar de pie o sentado.

Debilidad y entumecimiento muscular

Si tiene daño en el nervio sacro, puede experimentar debilidad en la pierna y /o el pie. Es posible que tenga una sensación de falta de fuerza en los músculos, o incluso adormecimiento. Es posible tener una combinación de debilidad y entumecimiento en una pierna, donde una parte de la pierna se siente débil y otra parte adormecida o con hormigueo, como si estuviera dormida.

Incontinencia

El daño del nervio sacro puede provocar una Falta de control de la vejiga o del intestino. A menudo llamado síndrome de Cauda Equina, este es un síntoma que requiere atención médica seria. La compresión o inflamación de las raíces nerviosas puede hacer que pierda el control de la micción o la evacuación intestinal, o sentir la necesidad de orinar con frecuencia.

Prevención

Puede prevenir el daño del nervio sacro o la recurrencia del mismo. haciendo ejercicio regularmente para mejorar la salud física en general. El uso de una postura adecuada al estar de pie o sentado es imprescindible para prevenir todo tipo de dolor de columna, incluida la ciática. La elección de un colchón de alta calidad también ayudará, ya que apoyará y alineará adecuadamente su columna vertebral.

Tratamiento

Hay muchos tratamientos para el daño del nervio sacro, dependiendo de la raíz del problema. La fisioterapia puede ayudar a rehabilitar la espalda y las piernas y también prevenir las recurrencias futuras. También se pueden prescribir medicamentos antiinflamatorios o relajantes musculares para ayudar a una persona a controlar el dolor. Las inyecciones epidurales de esteroides se pueden usar para suprimir la inflamación de los nervios sacros dañados y proporcionar alivio a corto plazo. Para la debilidad sostenida, el dolor o la incontinencia, la cirugía puede ser necesaria.