El zinc es un metal esencial que el cuerpo necesita para mantenerse saludable. El nutriente ayuda al sistema inmunológico, ayuda a producir proteínas y ADN y es importante para la correcta cicatrización de heridas. Las personas obtienen zinc al comer alimentos con el mineral y en formas suplementarias. Los alimentos con zinc incluyen carnes rojas, quesos, mariscos, legumbres, tofu y judías verdes. Las personas en riesgo de una deficiencia de zinc incluyen alcohólicos, mujeres embarazadas, personas con enfermedad renal o hepática y aquellas que sufren enfermedades inflamatorias del intestino como la enfermedad de Crohn.

Síntomas de deficiencia de zinc

No es común desarrollar una deficiencia de zinc para las personas que viven en América del Norte, de acuerdo con la Oficina de Suplementos Dietéticos. Los síntomas de una deficiencia de zinc incluyen pérdida de peso, disminución de la cicatrización, pérdida del cabello, disminución del sentido del gusto y el olfato, náuseas y vómitos, crecimiento lento y niveles bajos de insulina. Pueden aparecer llagas en la piel, que sanan lentamente. Una lengua agrietada no es un síntoma común de la deficiencia de zinc.

Síntomas adicionales de la boca

Aunque la deficiencia de zinc no suele causar una lengua fracturada, puede causar síntomas adicionales en la boca. Las personas que sufren de síndrome de boca ardiente también pueden tener niveles bajos de zinc. El aumento de los niveles de zinc que toman suplementos puede ayudar a aliviar los síntomas del síndrome de ardor bucal.

Tratamiento

Aumentar la ingesta dietética de zinc o tomar fuentes suplementarias del mineral puede ayudar a tratar una deficiencia de zinc y reducir cualquier síntoma bucal asociado con la condición. La ingesta recomendada de zinc es de 8 mg para mujeres adultas y 11 mg para hombres adultos, según el Centro Médico de la Universidad de Maryland. El tratamiento para la deficiencia consiste en tomar de 14 a 120 mg de zinc por día hasta que los síntomas se detengan, de acuerdo con la Biblioteca médica en línea de Merck Manuals.

Posibles causas de problemas en la lengua

Algunas afecciones médicas pueden causar problemas orales , como una lengua adolorida o agrietada. Una condición llamada enfermedad de Kawasaki puede causar una lengua roja e inflamada y labios secos y agrietados. Un virus puede causar pequeñas llagas blancas o amarillas, también llamadas úlceras bucales, que se forman en la lengua. Una reacción alérgica a un medicamento, comida o algo en el medio ambiente que puede causar una lengua roja e inflamada. Una infección oral por levadura, también llamada candidiasis, puede causar manchas blancas en la lengua que sangran y son dolorosas cuando se raspan. Una afección inflamatoria, llamada liquen plano oral, puede causar llagas abiertas en el costado de la lengua, pero puede desaparecer con una higiene oral adecuada, limitando el consumo de alcohol y dejar de fumar, según Family Doctor.org.