El prolapso pélvico ocurre cuando los músculos y los ligamentos que sostienen la pelvis de una mujer se debilitan y los órganos pélvicos, como la vejiga y el útero, se salen de su lugar. El parto, la menopausia y la histerectomía son algunos de los factores de riesgo comunes para el prolapso de los órganos pélvicos. Las opciones de tratamiento dependen de los órganos involucrados y se puede recomendar la cirugía para tratar casos graves. Junto con los ejercicios de Kegel, ciertos suplementos de vitaminas y minerales pueden ayudar a prevenir el prolapso pélvico.

Vitamina D

La vitamina D es una vitamina soluble en grasa que se encuentra en el pescado, las ostras y los productos lácteos. El cuerpo humano también puede producir cantidades significativas de vitamina D cuando se expone a la luz solar durante al menos 10 minutos durante el día. Las personas con una exposición al sol mínima y veganos y vegetarianos estrictos pueden considerar tomar suplementos de vitamina D sintéticos que se pueden comprar en la mayoría de las farmacias sin receta. Sin embargo, es importante seguir las instrucciones de dosificación en la etiqueta de los suplementos, ya que el uso excesivo crónico de los mismos puede provocar cálculos renales, vómitos y dolor muscular. La vitamina D juega un papel importante en la promoción de la salud ósea al ayudar al cuerpo a absorber el calcio y el fósforo de manera más eficiente. Un estudio publicado en la edición de abril de 2010 de "Obstetrics and Gynecology" afirma que una de cada cuatro mujeres en los Estados Unidos tiene algún tipo de trastorno del suelo pélvico y que los niveles más altos de vitamina D pueden reducir el riesgo de padecer enfermedades como el prolapso de los órganos pélvicos e incontinencia urinaria.

Vitamina C

La vitamina C, o ácido ascórbico, es una vitamina soluble en agua que es esencial para el crecimiento, desarrollo, reparación y mantenimiento de varios tejidos y órganos del cuerpo. También juega un papel crucial en la síntesis de colágeno, que es un componente esencial de los ligamentos que sostienen el suelo pélvico y los órganos pélvicos. Las frutas cítricas, bayas, tomates, pimientos y vegetales de hojas verdes son buenas fuentes de vitamina C, junto con los suplementos sintéticos. El malestar estomacal y la diarrea son los efectos secundarios más comunes asociados con una sobredosis de vitamina C.

Calcio

El calcio es el mineral más abundante en el cuerpo humano. Además de desempeñar un papel importante en la contracción de los músculos y vasos sanguíneos, la síntesis de hormonas y la función del sistema nervioso central, el calcio también ayuda a fortalecer los dientes y los huesos, incluidos los huesos pélvicos. Los alimentos como los productos lácteos y los vegetales de hojas verdes son ricos en calcio. También puede usar suplementos de calcio, que generalmente son bien tolerados con efectos secundarios mínimos.