Azúcar de fruta vs. Otros azúcares

La fructosa, también llamada azúcar de frutas, es una de las principales fuentes de energía en la dieta estadounidense. La fructosa es un azúcar presente naturalmente en las frutas, el jarabe de arce y la miel. Los fabricantes usan fructosa para hacer jarabe de maíz con alto contenido de fructosa, un edulcorante agregado a los alimentos procesados. Su cuerpo metaboliza la fructosa de manera diferente a como lo hace con otros azúcares. Comer fructosa aumenta ciertos riesgos para la salud; consulte a su nutricionista sobre los beneficios y riesgos de comer fructosa versus otros azúcares.

Fructosa vs. Glucosa

La fructosa y la glucosa son moléculas únicas de azúcar llamadas monosacáridos. Tienen estructuras similares, pero tu cuerpo las metaboliza de manera diferente. La glucosa es el azúcar que las células de todo el cuerpo metabolizan para obtener energía. Su hígado convierte la fructosa de la fruta en glucosa, pero la convierte en edulcorantes altamente concentrados, como el jarabe de maíz con alto contenido de fructosa, en grasa. Científicos de la Universidad de California Davis, en una investigación publicada en "The Journal of Clinical Investigation" en 2009, compararon bebidas endulzadas con glucosa con bebidas endulzadas con fructosa. Encontraron que las bebidas endulzadas con fructosa aumentan la producción y el almacenamiento de grasa dentro del cuerpo; elevar los niveles sanguíneos de grasa, colesterol, azúcar e insulina; y disminuir la sensibilidad a la insulina.

Fructosa vs. Sacarosa

La sacarosa es un disacárido hecho de fructosa y glucosa. La sacarosa es más conocida como azúcar de mesa, un fabricante de edulcorantes que se utiliza en muchos productos alimenticios. El jarabe de maíz alto en fructosa es una mezcla de fructosa y glucosa. El cuerpo metaboliza la fructosa del jarabe de maíz alto en fructosa de manera diferente a la forma en que lo hace la sacarosa. Científicos de la Universidad de Princeton descubrieron que las ratas alimentadas con jarabe de maíz con alto contenido de fructosa ganan más grasa y peso abdominal que las ratas alimentadas con la misma cantidad de calorías de sacarosa, según una investigación publicada en "Farmacología, bioquímica y comportamiento" en noviembre de 2010.

Fructosa Vs. Lactosa

La lactosa es un disacárido en la leche hecha de glucosa y galactosa. Su cuerpo necesita una enzima llamada lactasa para digerir la lactosa. La fructosa y la lactosa son dos azúcares comúnmente asociados con las intolerancias alimentarias. La intolerancia a la fructosa implica dos condiciones diferentes. Uno es un raro trastorno genético caracterizado por una falta de enzimas que descompone la fructosa y aumenta el riesgo de daño hepático y renal. La otra es una condición de malabsorción caracterizada por dificultad para digerir la fructosa y síntomas que incluyen hinchazón, gases, dolor abdominal y diarrea. Las personas con intolerancia a la lactosa tienen una deficiencia de lactasa; no pueden digerir la lactosa y pueden sufrir de náuseas, distensión abdominal, gases, calambres abdominales y diarrea. Pueden reducir los síntomas al consumir lactasa de un suplemento.

Fructosa vs. Maltosa

La maltosa es un disacárido hecho de dos moléculas de glucosa que se encuentra naturalmente en el grano en germinación y en pequeñas cantidades en el jarabe de maíz. El proceso de malteado en la producción de cerveza convierte el almidón de la cebada en maltosa. Aunque la fructosa y la maltosa se encuentran en el jarabe de maíz, difieren en su dulzura. Científicos de la City University de Nueva York descubrieron que las ratas prefieren la maltosa en concentraciones bajas y altas a la fructosa, según una investigación publicada en "Fisiología y comportamiento" en 1987.