La dosis de un suplemento de hierro para un niño de 2 años

A veces, un niño de 2 años requiere hierro adicional, y un pediatra puede recomendar un suplemento vitamínico que incluya este mineral o un suplemento de hierro por sí solo. Es posible que los análisis de sangre hayan demostrado que su hijo es anémico o puede tener otro trastorno relacionado con la deficiencia de hierro. Esto puede suceder incluso si le está dando a su hijo una dieta saludable. Elevar los niveles de hierro de su hijo de 2 años es bastante fácil con la suplementación. Pero si su pediatra no lo ha recomendado, llame a su consultorio para asegurarse de que esté bien.

Necesidades de hierro de un niño de 2 años

Su hijo de 2 años necesita 10 mg de hierro cada uno día y seguirá necesitando 10 mg hasta que sea una adolescente. Los niños necesitan mucho hierro para ayudar con los brotes de crecimiento. El hierro produce hemoglobina, que transporta oxígeno al cuerpo. Tanto el cuerpo como el cerebro requieren hierro para funcionar. La deficiencia de hierro podría hacer que su hijo carezca de energía y se canse fácilmente.

Vitaminas de hierro

Los suplementos de hierro para niños pueden estar en forma líquida o en pastillas. El hierro líquido para niños generalmente se presenta en forma de jarabe como sulfato ferroso o succinato ferroso. La dosis es generalmente de 2 mg por libra de peso corporal administrada aproximadamente tres veces al día. La suplementación puede durar dos meses para que los niveles de hierro de su hijo mejoren.

Fuentes de hierro

La suplementación de hierro puede no ser necesaria si su hijo tiene una deficiencia leve y es un buen consumidor. Muchos alimentos son ricos en hierro. Carne de res, lentejas, higos, tofu, semillas de calabaza y melaza negra contienen 2 o más mg. Por porción. También puede cocinar en ollas de hierro, beber jugo de ciruela y utilizar granos ricos en hierro en su cocina.

Deficiencia de hierro

Si su hijo es deficiente en hierro, puede desarrollar anemia. Estudios recientes han relacionado la anemia con el desarrollo infantil lento, especialmente el desarrollo del habla. Algunos signos de deficiencia de hierro son piel pálida en la cara y lóbulos de las orejas. También puede notar un aumento de la irritabilidad, fatiga, falta de aliento, debilidad y dificultad para concentrarse. Su hijo también puede ser más susceptible a las infecciones e intolerante a las temperaturas frías.