La pelusa que se acumula después de secar la ropa en la secadora puede ser bastante tóxica y peligrosa. El peligro más conocido de esta sustancia es su inflamabilidad, lo que crea la posibilidad de incendios si no se limpia adecuadamente a menudo. También puede contener bastantes productos químicos que pueden ser tóxicos de varias maneras diferentes si se inhalan. Estos productos químicos provienen de los suavizantes de telas, la ropa en sí y otros factores ambientales que entran en la ropa y el secador.

Respiratorio

Una preocupación común son los efectos respiratorios provocados por la inhalación de pelusa del secador. La pelusa física, incluso sin el potencial de los productos químicos, es una sustancia extraña que no debe entrar en sus pulmones. Si lo hace, podría causar tos y dificultad para respirar. Algunos de los químicos que se dirigen específicamente al sistema respiratorio provienen de suavizantes de telas. Se ha encontrado que el alfa-terpineol causa irritación de las membranas mucosas y enfermedades de tipo pulmonar que pueden provocar una inflamación severa de los pulmones si se inhalan. El alcohol bensílico causa trastornos respiratorios superiores que pueden causar insuficiencia respiratoria. Cáncer

Se han estudiado varias de las mismas sustancias, así como un puñado de otras, y se ha demostrado que crean efectos cancerígenos. Algunos productos químicos se encuentran incluso en la “Lista de desechos peligrosos” de la Agencia de Protección del Medio Ambiente. Un ejemplo de uno de estos productos químicos es el cloroformo, que no debe calentarse y puede causar tumores en el hígado y los riñones. Otro químico cancerígeno encontrado en la pelusa del secador es el acetato de bencilo, que puede ser la causa de los cánceres pancreáticos.

Trastornos del SNC

Los trastornos del sistema nervioso central (SNC) pueden ser extremadamente problemáticos. Estos trastornos pueden ser cualquier cosa, desde un dolor de cabeza hasta convulsiones graves. Varios de los químicos que se encuentran en la pelusa del secador que pueden causar trastornos del SNC provienen de los retardantes de llama que se usan en la tela. Algunos ejemplos son los éteres de difenilo polibromados, el alcanfor y el etanol. Estos también pueden ser muy peligrosos en niños pequeños o mujeres embarazadas, ya que pueden provocar defectos de nacimiento que involucran las habilidades motoras y el comportamiento de acuerdo con estudios realizados en ratones y ratas.