No importa lo cuidadoso que sea sobre su higiene bucal, a veces, puede tener un mal sabor de boca que simplemente no desaparece. Ya sea los restos de alimentos de sabor fuerte, los resultados de un resfriado o gripe, o un misterioso sabor metálico o amargo, un sabor desagradable en la boca puede distraer y en el peor de los casos enfermar. Afortunadamente, hay algunos trucos para ayudar a deshacerse de ese sabor desagradable.

Practique una higiene bucal adecuada. Si el mal sabor proviene de la halitosis común (mal aliento), un programa regular de higiene bucal debería resolver su problema. Esto significa lavarse los dientes y usar hilo dental, y usar el enjuague bucal regularmente. Asegúrese de cepillarse adecuadamente y de limpiar toda la boca, incluidas las encías y la lengua.

Pregunte a su médico si alguna de sus recetas puede estar causando el mal sabor. A veces, los medicamentos pueden dejar un sabor metálico en la boca que parece no desaparecer. Si este es uno de los efectos secundarios de su medicamento, pregúntele a su médico si hay algún medicamento alternativo que no produzca el sabor metálico.

Tome tabletas de vitamina C o aumente su la ingesta de vitamina C al comer más cítricos o tomar jugos cítricos, como el jugo de naranja o de pomelo. Esto ayudará a eliminar el mal aliento persistente, lo que puede dejar un mal sabor de boca.

Chupe las mentas de aliento. Este es un buen remedio para un mal sabor temporal que puede provenir de comer alimentos de sabor fuerte. Los dulces con sabor a limón también pueden enmascarar o disminuir un mal sabor.

Cepille sus dientes con una pasta hecha de bicarbonato de sodio y sal. Esto eliminará la placa de la boca y las bacterias que pueden ser responsables del sabor desagradable en su boca. También neutralizará cualquier ácido, que puede ser otro culpable del mal sabor.

Enjuáguese la boca con una solución de sal y agua, o peróxido de hidrógeno y agua. Si tiene una pequeña infección oral, esto actuará para tratarla. Asegúrese de no tragar esta solución, especialmente si está utilizando peróxido de hidrógeno, que es peligroso ingerir.

Visite a un dentista. Si otros pasos no funcionan, es posible que tenga un problema periodontal grave que requiera tratamiento. Un viaje regular al dentista para un chequeo y una limpieza es siempre una buena idea, ya que contribuirá a su salud bucal general y eliminará muchos de los factores que inicialmente causan un mal sabor de boca.