¿Qué edad debe tener un bebé antes de usar una almohada?

Al recostar su cabeza sobre una almohada suave cada noche, puede preocuparse de que su bebé se sienta incómodo al dormir sobre un colchón plano. Sin embargo, dormir con una almohada es potencialmente peligroso para los niños pequeños. Es posible que su hijo no necesite una almohada durante los primeros años de su vida. Use sus observaciones sobre el desarrollo y los consejos de su pediatra para decidir cuándo está lista.

Peligro de la almohada

La razón principal por la que los expertos advierten sobre la colocación de almohadas en la cuna del bebé es el riesgo de asfixia. Si a un bebé se le presiona la cara en una almohada, no tendrá la fuerza del cuello para mover la cabeza y sacar la boca y la nariz. Una almohada en un estuche abierto también representa un riesgo, ya que un bebé podría atascarse la cabeza dentro del estuche. Los bebés también son sensibles a los alérgenos, como los ácaros del polvo, plumones y plumas, y dormir sobre estos materiales toda la noche puede provocar reacciones alérgicas graves.

Cuándo presentar almohadas

La Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de los EE. , recomienda mantener todas las almohadas fuera de la cuna de su bebé durante al menos los primeros 12 meses de su vida, pero Judith Owens, experta en sueño pediátrico, recomienda mantener las almohadas alejadas de su bebé hasta que tenga al menos 2 años de edad. Su bebé necesita tener el control de la cabeza y el cuello para alejar su cara de una almohada si no puede respirar, por lo que un niño que tiene problemas de desarrollo puede no estar listo para una almohada incluso después de su segundo cumpleaños. Su pediatra puede ayudarlo a decidir cuándo es el momento de introducir las almohadas. Si su hijo parece estar perfectamente cómodo sin una almohada, puede esperar hasta que se acueste en la cama para darle una.

Cómo elegir una almohada

Cuando su bebé esté listo para dormir con una almohada, no lo haga. Tira una de las almohadas de tu cama en la cuna. Compre una almohada nueva para protegerla de los gérmenes o el polvo que se han acumulado en su hogar y elija una almohada pequeña y firme. No necesita ser mucho más grande que 12 por 12 pulgadas. Elija una almohada con una funda cosida que esté etiquetada como hipoalergénica, en lugar de una llena de plumas.

Seguridad de la cuna

Las almohadas no son el único peligro cuando su bebé tiene menos de 12 meses. Consulte saferproducts.gov para asegurarse de que su modelo de cuna no haya sido retirado por motivos de seguridad. Cualquier manta, edredón o peluche borroso puede representar una amenaza de asfixia. Su bebé debe dormir boca arriba sobre un colchón con una sábana ajustada y ajustada. Vístela con un pijama cálido en lugar de cubrirla con una manta. Si tiene miedo de que tenga frío, la CPSC recomienda colocarla con sus pies cerca del extremo de la cuna y meter la manta debajo del extremo del colchón para que no se pueda mover. Después de su primer cumpleaños, hable con su pediatra sobre si es seguro introducir más mantas en su cuna.