Cómo ayudar a los niños sensibles sensoriales

La sensibilidad sensorial, también conocida como trastorno del procesamiento sensorial, es una condición que, hasta hace poco, no se ha entendido completamente. La Fundación para el Trastorno del Procesamiento Sensorial estima que uno de cada 20 niños se ve afectado por esta condición. La sensibilidad sensorial ocurre cuando la información sensorial se filtra incorrectamente y, por lo tanto, se intensifica en su camino hacia el cerebro. Como resultado, los niños con sensibilidad sensorial pueden molestarse con los sonidos, texturas u olores. Al comprender la naturaleza de esta condición, puede ayudar a que su niño sensible a la sensibilidad funcione bien.

Ajuste la textura y la temperatura de la ropa de su niño. De acuerdo con el sitio web de educación especial y de remediación, algunos niños con sensibilidad sensorial tienen dificultades para usar ciertos tipos de ropa, especialmente aquellos que se ajustan bien, tienen picazón o están fríos al tacto. Puede trabajar con su hijo en esto planeando su ropa la noche anterior, ya que esto lo ayudará a saber qué esperar. En invierno, también debe calentar la ropa de su hijo, ya sea cerca de un calentador o en la secadora.

Proporcione alimentos crujientes y texturas separadas durante las comidas. El sitio web de educación especial y de remediación recomienda que tenga a mano alimentos crujientes para su niño sensible a la sensibilidad sensorial, ya que estos alimentos facilitan un importante "sexto sentido" llamado propiocepción, en el cual la retroalimentación sensorial hace que una persona sea consciente del movimiento y la posición del cuerpo. Los alimentos crujientes pueden ayudar a su hijo a desarrollar una mejor propiocepción. Además, evite mezclar alimentos que tengan texturas conflictivas, como el puré de papas y la salsa.

Evite sobrecargar el horario de su hijo. La educación especial y de remediación dice que es especialmente importante no "reservar en exceso" a un niño sensible a los sentidos, ya que es probable que esto la abrume. Trate de espaciar las fiestas de cumpleaños, los viajes al zoológico o los picnics, para que no ocurran el mismo día.

Practique una presión profunda. Según Remedial and Special Education, la "presión profunda" se refiere a un tipo de contacto que puede ayudar a desensibilizar la experiencia táctil de su hijo. Esto podría incluir un masaje, un "abrazo de oso" o envolver a su hijo cómodamente en una manta.

Pruebe la terapia ocupacional. La Fundación de Trastornos del Procesamiento Sensorial dice que los niños con esta afección pueden beneficiarse de un tipo de tratamiento conocido como terapia ocupacional. Este tipo de terapia, que se centra en la integración sensorial, a menudo se lleva a cabo en un entorno de gimnasio con estímulos intensificados. Aunque es enseñado por un médico, la terapia ocupacional a menudo involucra la participación de la familia.

Sugerencia

Evite los suavizantes de telas con olor fuerte. La educación especial y de remediación enfatiza que un suavizante de telas muy perfumadas puede perturbar el uso de la ropa por parte de los niños sensitivos, y posiblemente perturbar el sueño si se usa en sábanas.