¿Cómo puede una mujer de 50 años sentirse motivada para ponerse en forma?

Tener 50 años no es una excusa para subirse a un sofá y sumergirse en un estilo de vida alimentado por telenovelas y bocadillos. El proceso de envejecimiento provoca numerosos cambios fisiológicos, que incluyen músculos menos flexibles, flacidez de la piel, procesos metabólicos más lentos y aumento de peso, escribe Cecilia Kilpatrick en "The Southern Illinoisan". Otros cambios pueden incluir deterioro de los huesos y menos eficiencia en su corazón. Estar motivado para ponerse en forma y mantenerse saludable es crucial para ayudar a aliviar o prevenir algunos de estos problemas.

Comparta su historia

Conectarse con otras personas puede ayudarlo a motivarse para ponerse en forma, escribió Ann Brenoff en "El Huffington Post". Esto es especialmente cierto si está regresando a un régimen de acondicionamiento físico y nutrición después de pasar años desarrollando una carrera o criando una familia. El apoyo de sus compañeros puede ayudarlo a mantenerse motivado. Puede comenzar un blog siguiendo su progreso o simplemente decirle a su familia que planea ir a correr después de la cena. Compartir su historia con otras personas puede ayudarlo a responsabilizarse: los miembros de la familia pueden llamar la atención si lo ven en la cena, en lugar de trotar, una vez que haya hecho el anuncio. Si está publicando sus planes de ejercicio, las libras perdidas o las fotos de su nuevo vestuario de gimnasio en un blog, los seguidores pueden publicar comentarios positivos, preguntas o estímulos que lo ayuden a mantenerse motivado.

Elija a sus profesionales con cuidado

A menudo es útil tomar clases de gimnasia o trabajar con un entrenador personal para aumentar sus esfuerzos de ejercicio. Pero elige cuidadosamente a estos profesionales. En un artículo de la "Revista de actividad física y salud" de 2012, Frederiki C. Moustaka escribe que las mujeres de mediana edad recibieron instrucción física basada en dos estilos de enseñanza diferentes. Un estilo de enseñanza enfatizó el mejoramiento de la autodeterminación y la autonomía para sostener los esfuerzos de acondicionamiento físico, mientras que el otro estilo de enseñanza se enfocó menos en la motivación intrínseca. Seleccione maestros y capacitadores que lo alienten a trabajar más duro, a sentirse orgulloso de sus esfuerzos y que le enseñen las herramientas para administrar sus propios objetivos de acondicionamiento físico para que pueda sentirse capacitado y motivado para ponerse en forma.

Examine sus motivaciones extrínsecas

Una motivación extrínseca es una razón externa para hacer algo. Por ejemplo, a los 50 años es posible que desee perder peso, demostrarle a la sociedad que no está envejeciendo o encajar con amigos que nunca parecen abandonar sus máquinas para correr y sus máquinas elípticas. Si bien estas motivaciones podrían funcionar para usted, la investigación muestra que las motivaciones extrínsecas pueden generar tensión y presión. Compararte con otras mujeres de tu edad puede ser una batalla perdida; alguien siempre parecerá más delgado, más tonificado o más flexible que tú. No necesita descartar o minimizar las motivaciones extrínsecas, pero intente mantener su enfoque positivo.

Consulte con su médico

A veces, una revisión de la realidad sobre su salud puede proporcionarle motivación para ponerse en forma. Llevar más peso y el proceso natural de envejecimiento puede reducir su salud general, pero hacer ejercicio y comer bien puede ayudar a contrarrestar estos posibles problemas. Susan Krauss Whitbourne escribe en "Psychology Today" que el ejercicio puede reducir la presión arterial y disminuir el riesgo de diabetes tipo 2. Su sistema inmunológico mejorará, desarrollará masa muscular y podrá disminuir el riesgo de osteoporosis a través del ejercicio. Ponerse en forma también puede ayudarlo a dormir mejor, tener más energía y mantener su deseo sexual.