¿Qué es el egocentrismo en los adultos?

El egocentrismo es un componente natural de la infancia, ya que la mayoría de los niños deben ser egocéntricos para poder sobrevivir. Sus cerebros aún no se han desarrollado para comprender que otros existen en el mundo con necesidades que son iguales a las suyas. Si los niños llegan a ser adultos y aún exhiben un comportamiento egocéntrico, entonces la razón podría ser una complicación cognitiva.

Brechas en la comunicación

Aquellos que son egocéntricos luchan por comunicarse con otros. No entienden cómo leer el lenguaje corporal o el estado emocional de otra persona, lo que les dificulta tener una comunicación saludable. Esto también hace que les resulte difícil ver la perspectiva de otra persona sobre un tema y comprender el punto de vista de una persona. Los egocéntricos solo entienden su propio punto de vista.

Autoestima baja

Aunque un egocéntrico tiende a ser percibido como arrogante y orgulloso, la raíz de este problema a menudo se debe a la baja autoestima. Con su comportamiento aparentemente egocéntrico, esta persona está tratando de compensar los sentimientos de baja autoestima e inseguridad. Este comportamiento a menudo se exhibe cuando los egocéntricos se encuentran en una situación en la que se sienten intimidados o inferiores. Es posible que perciban a otra persona como aspectos amenazadores de su ego y, por lo tanto, corran hacia una defensa inmediata de ellos mismos.

Exageración

Los egocéntricos desarrollan un complejo de superioridad para que otros los acepten. Los egocéntricos exageran sus propias habilidades y logros para obtener reconocimiento. A su vez, los egocéntricos también se burlarán de los demás, burlándose de su falta de habilidades para ser percibidos como más talentosos que los demás. el rasgo viene de A menudo se debe a la forma en que los egocéntricos fueron criados como niños. A menudo, sus padres eran muy permisivos y no les daban suficiente disciplina como niños. Los egocéntricos a menudo también fueron mimados o mimados y recibieron una cantidad de elogios por encima del promedio, lo que hizo que se vieran a sí mismos de una manera poco realista.