Cómo prevenir las cicatrices después de abdominoplastia

Una cirugía de abdomen o abdominoplastia es un procedimiento de cirugía estética que consiste en la eliminación del exceso de piel y grasa con el fin de salir del estómago más tonificada y firme. Muchas mujeres pasan por la cirugía estética de abdomen después de tener hijos o perder mucho peso, cuando se quedan con exceso de piel alrededor de la zona del estómago. El procedimiento puede ser de gran ayuda a las mujeres para aumentar su autoestima y confianza en sí mismo. Tummy tuck cicatrices son básicamente inevitable, ya que el cirujano plástico debe cortar el piel durante el procedimiento y esto deja una cicatriz en la piel. Sin embargo, hay cosas que usted puede hacer para prevenir la cicatrización después de la abdominoplastia por lo que la cicatrización es tan mínimo e imperceptible posible. Instrucciones
1

Frote el aceite de oliva o manteca de cacao en la piel - en particular la zona inferior del estómago - a diario, por lo menos dos semanas antes de la cirugía. Masajear estas cremas en la piel ayuda a nutrir la piel y prepararla para la cirugía.
2

Comer comidas saludables y nutritivos y hacer ejercicio regular. La mejor forma que está antes de la cirugía, más rápido se recupere y la menos probable es que el desarrollo de cicatrices. Base sus comidas alrededor de frutas frescas, verduras, panes y cereales integrales, frutos secos y semillas.
3

Siga cuidadosamente las instrucciones post-operatorias. Incluso después de que empiece a sentirse mejor, es importante seguir las instrucciones de su cirujano para evitar las cicatrices y ayudar a evitar la infección también. Los cirujanos recomiendan a los pacientes a evitar el tabaco y el alcohol, y decir a los pacientes para limitar el movimiento para reducir la severidad de la cicatrización después de la cirugía.
4

Use aceite de la vitamina E en el área de la incisión. La vitamina E es un acondicionador de la piel y se puede utilizar a diario como un tratamiento natural y seguro para la cicatrización. Coma alimentos fuentes de vitamina E, como las almendras, maní, brócoli, mango y espinacas. Tomar suplementos de vitamina E también puede ayudar.