Consejos para la Recuperación de la amigdalectomía como adulto

amigdalectomía, la extirpación de las amígdalas, es una cirugía ambulatoria realizada por varias razones diferentes. Mientras que el procedimiento a menudo se realiza bajo anestesia general, lo que significa que el paciente está inconsciente y no siente dolor, el proceso de recuperación puede ser un poco doloroso. Hay algunas maneras de aliviar el dolor después de la cirugía. Hacer algunos preparativos antemano

Para prepararse para una recuperación óptima, hay algunas cosas que deben ser dispuestos, incluso antes de ir para la cirugía. Asegúrese de que su empleador tiene conocimiento del procedimiento y el tiempo de recuperación necesario. Los expertos de la Clínica Mayo recomiendan tomar siete a 10 días fuera del trabajo, pero si su trabajo requiere actividad física más intensa, es posible que desee tener más tiempo libre. Además, los arreglos para un viaje seguro a casa después de la cirugía ya que todavía se recupere de la anestesia y no puede conducir.
Coma alimentos blandos

Mientras se recupera de una amigdalectomía, es importante comer alimentos que son suaves y fáciles de digerir. Pruebe las sopas, budines, yogurt, gelatina, puré de manzana, helado o avena hasta que el dolor de garganta es menor y la deglución se vuelve más fácil. Cuando usted comienza a comer más alimentos sólidos, evitar aquellos que son crujientes y tienen bordes duros, tales como patatas fritas, ya que pueden irritar la garganta y causar sangrado. Además, se mantenga alejado de los alimentos ácidos o agrios que pueden picar la garganta. Los expertos de la Clínica Mayo recomiendan goma de mascar para aliviar el dolor y ayudar a la curación.
Permanezca bien hidratado

La deshidratación es un problema común después amigdalectomía debido a la dificultad para tragar. No beber suficiente puede causar sequedad en la garganta, lo que no hará sino aumentar el malestar. Asegúrese de beber suficientes líquidos para mantenerse hidratado. Chupar cubitos de hielo, comer un helado o un helado, o incluso tomando una bebida fría son maneras de ayudar a refrescar la garganta y traer un poco de alivio al dolor. Además, la colocación de un humidificador en la habitación con el paciente es una fuente útil de alivio del dolor después de la cirugía.
Evite el comportamiento peligroso

Cuídate después de la cirugía para asegurar una recuperación rápida. Si le recetan medicamentos antibióticos, tómelos según las indicaciones para ayudar a prevenir infecciones. Haga todo lo posible para permanecer lejos de las multitudes y la exposición a los que puede estar enfermo para evitar la captura de algo contagioso. Evite participar en actividades extenuantes durante al menos dos semanas después de la cirugía para evitar mayores complicaciones. Los expertos de la Clínica Mayo también recomiendan dejar de fumar que no se obstaculice el tiempo de recuperación y para evitar problemas respiratorios durante la cirugía.