Cómo tratar la artritis Naturalmente

Muchos de los medicamentos disponibles para tratar la artritis, tienen efectos secundarios desagradables, duros. Si bien estos medicamentos funcionan bien para mucha gente, otros encuentran los beneficios que obtienen no valen los riesgos. Afortunadamente, un montón de alternativas eficaces existen para el tratamiento de la artritis de forma natural. Instrucciones
1

Investigar antiinflamatorios naturales. El jengibre, la cúrcuma y pimienta de cayena son excelentes antiinflamatorios naturales que han demostrado su eficacia en ensayos clínicos. Usted puede comprar las versiones de estas especias en polvo en cápsulas en las tiendas naturistas o simplemente puede utilizar a diario en su cocina.
2

Tomar Omega-3 aceites. Estudios recientes han demostrado Omega-3 aceites a ser muy eficaz para reducir el dolor y la inflamación de la artritis. Aceites Omega-3 se encuentran en las cosas tales como las nueces, el salmón y las semillas de lino y también se pueden comprar en forma de cápsulas en las tiendas naturistas.
3

ejercicio con frecuencia. El ejercicio aumenta el flujo de sangre a las articulaciones y también libera endorfinas, los analgésicos naturales, en su sistema. Ejercicios de levantamiento de pesas y estiramientos suaves luz son los mejores para la artritis.
4

uso de glucosamina y condroitina. Estos constructores de colágeno naturales ayudan a restaurar el cartílago y ligamento del tejido que ha sido dañado por la artritis. La glucosamina y la condroitina se pueden encontrar en la sección de la vitamina de la mayoría de las tiendas de comestibles.
5

Comer muchas frutas y verduras. Los antioxidantes de origen natural en los productos frescos se cree que tienen un efecto beneficioso sobre la curación de la artritis y puede ayudar a reducir la inflamación. Para obtener los mejores resultados, obtener 7 a 9 porciones de una variedad de productos de vivos colores todos los días.
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Evite los alimentos del disparador. Alimentos del disparador son los que se cree que promueve la inflamación y aumentar el dolor. Los productos lácteos, carne roja y verduras solanáceas (como la berenjena, pimientos, papas y tomates) son algunos de los alimentos desencadenantes identificados con mayor frecuencia.