Dietas especiales para el autismo

El autismo es un trastorno que aparece temprano en la vida y que puede afectar a la interacción social, el lenguaje y el comportamiento de un individuo. Aproximadamente de tres a seis de cada 1.000 niños en los Estados Unidos tienen autismo, según la Clínica Mayo. Si bien no existe una cura para el autismo, cambios en la dieta pueden mejorar significativamente los síntomas del autismo. La eliminación del gluten

Algunos investigadores creen que los péptidos del gluten, que se encuentra en muchos granos y cereales, pueden jugar un papel en el autismo, según el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Maine. Sin embargo, un estudio de 2006 publicado en el Diario de Autismo y Trastornos del Desarrollo, encontró que la eliminación del gluten no dio lugar a diferencias significativas en el comportamiento u otros síntomas de autismo. Un segundo estudio publicado en la revista, el foco en el Autismo y Otros Trastornos del Desarrollo, encontró que la eliminación del gluten de hecho mejorar los síntomas del autismo. Sin embargo, este estudio ha sido criticado por algunos, incluyendo un comité de investigación con el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Maine, que tienen fallas metodológicas.
Vitamina B6

Para más de tres décadas, las demandas se han hecho que la vitamina B6 mejora los síntomas de las personas con autismo. Numerosos estudios han examinado la relación entre la B6 y el autismo. Por ejemplo, un estudio de 2002 dirigido por Shigehisa Kuriyama encontró que un grupo de individuos con autismo se les administró 100 mg de vitamina B6 una vez al día durante dos semanas experimentaron una mejoría en la capacidad lingüística en comparación con sus contrapartes que recibieron un placebo. Otros estudios, sin embargo, concluyó que la vitamina B6 no mejora los síntomas de autismo, ya partir de 2009, la mayoría de los investigadores coinciden en que no hay pruebas suficientes para concluir que la vitamina B6 mejora los síntomas del autismo. Los alimentos que son ricos en vitamina B6 incluyen granos de cereales, zanahorias, espinacas, guisantes, patatas, leche, queso, huevos, pescado, hígado y harina.
Vitamina C

Muchos investigadores creen que la vitamina C puede regular la dopamina y así inhibir muchas de las conductas problemáticas asociadas con el autismo, como los movimientos repetitivos. Un estudio de 1993 publicado en la revista Avances en Neuro-psicofarmacología y psiquiatría biológica, encontró que la vitamina C causó una reducción significativa en los síntomas sensoriomotores en individuos autistas. Mientras que la evidencia preliminar sugiere que una dieta rica en vitamina C puede mejorar algunos de los síntomas asociados con el autismo, la investigación es todavía relativamente escasa.