¿Qué son las contracturas en flexión plantar?

Plantar se refiere a la parte inferior del pie. Una contractura en flexión plantar consiste en el pie, los dedos del pie y el tobillo e impide el movimiento normal del pie. Una contractura se produce cuando los músculos, los ligamentos, los tendones y la piel se acortan y se tensan provocando la restricción de movimiento en esa área. El tejido conectivo, que normalmente es elástica, pierde su elasticidad uso perjudican la de la articulación. Los espacios llenos de líquido alrededor de las articulaciones se secan y producen fibra de formulario. Las causas de una contractura

flexión plantar es un movimiento que consiste en señalar con el pie hacia abajo. Varias condiciones pueden causar una contractura a desarrollar en este ámbito. Estos incluyen defectos de nacimiento, la enfermedad de Huntington, distrofia muscular, parálisis cerebral, daño a los nervios, como un derrame cerebral o lesión de la médula espinal, quemaduras, daño a la piel y la falta de uso. Contracturas en flexión plantar suele ocurrir en las personas que están en cama, en silla de ruedas o han tenido un yeso en el pie durante mucho tiempo. En estas situaciones, las articulaciones no se ejercen adecuadamente como soporte del peso y el movimiento normal no están ocurriendo.
Cómo supervisar el pie

La Universidad de Maryland Medical Centro recomienda vigilar estrechamente la aparición de los tobillos, pies y dedos de los pies. Póngase en contacto con el médico si una contractura parece estar en desarrollo. Esté atento a los problemas de circulación, un aspecto doblada, torcida o rigidez del pie o una disminución de la amplitud de movimiento. La intervención temprana ayuda a reducir la posibilidad de daño permanente de una contractura plantar. Al monitorear de cerca los pies para los problemas de tratamiento temprano puede ser iniciado.
Prevenir una contractura

tiene menos probabilidades de desarrollar una contractura si los pies reciben rango adecuado de movimiento, el ejercicio, la posición correcta y que se extiende durante un período inmóvil o sobre una base regular si una enfermedad crónica está implicada. Ejercicios de rango de movimiento realizados por un fisioterapeuta, médico, o como parte de una rutina de cuidado personal son esenciales en la prevención de las contracturas. El Centro de Investigación y Capacitación para la Vida Independiente recomienda brindar apoyo para los pies y frecuentemente reposicionar el cuerpo a través del día como parte de una rutina preventiva.
El tratamiento de una contractura

Aproximadamente ocho músculos están involucrados en el movimiento de flexión plantar del pie. Si una contractura ha desarrollado en estos músculos es necesaria la intervención médica. De fundición, férulas o la cirugía puede ser necesaria para estirar los músculos y los ligamentos afectados. La cirugía se realiza en casos graves que no han respondido a otros tratamientos. El procedimiento quirúrgico depende de los músculos implicados y requiere un período de no-carga de peso y el entablillado después del procedimiento. Los resultados varían y en ocasiones puede conducir a una debilidad en el tobillo y el pie que afecta la movilidad.