Enfermedad arterial periférica en las piernas

Enfermedad arterial periférica (PAD) en las piernas es una condición que ocurre cuando los vasos sanguíneos de las piernas se obstruyen. Tu corazón hace circular la sangre por todo su cuerpo, la entrega de oxígeno y nutrientes y la eliminación de productos de desecho. Cuando un vaso sanguíneo se bloquea, entonces las piernas no reciben la cantidad adecuada de sangre u oxígeno. PAD que se deja sin tratamiento puede conducir a problemas graves de salud. Causas

Los vasos sanguíneos de las piernas pueden llegar a ser bloqueado de una afección llamada ateroesclerosis, que es una acumulación de placa en las paredes de los vasos. Su riesgo de PAD aumenta naturalmente con la edad. Su riesgo es mayor si usted fuma, tiene diabetes, presión arterial alta o colesterol, si usted tiene sobrepeso o tiene demasiado ácido amino en la sangre.
General Síntomas

En las primeras etapas de la enfermedad arterial periférica en las piernas, puede que no tenga ningún síntoma. Según avanza la enfermedad, puede notar dolor o molestias en las piernas al caminar, notar que desaparece cuando usted descansa. Otros síntomas en las piernas pueden incluir la piel sensación de frío, los cambios de color de la piel, o sensaciones de calambres, o debilidad, especialmente cuando se va cuesta arriba o escaleras.
Complicaciones

Si el PAD empeora, usted puede desarrollar úlceras o llagas en los pies. Con el tiempo pueden llegar a ser negro o gris y convertirse en gangrena. También puede ser más susceptible a las infecciones.
Diagnóstico

Para diagnosticar la enfermedad arterial periférica en las piernas, el médico hará un examen físico completo y tendrá una historia de sus síntomas. Le harán pruebas para la enfermedad del corazón o enfermedad coronaria. Los ultrasonidos, de resonancia magnética y angiografía puede ayudar a detectar obstrucciones en los vasos.
Tratamiento

La primera etapa del tratamiento es hacer algún cambio de estilo de vida necesarios, tales como perder el exceso de peso, dejar de fumar, reducir la presión arterial y el colesterol, y la incorporación de ejercicio regular en su rutina diaria. En casos severos, el médico puede recomendar la cirugía para desbloquear el vaso sanguíneo.