Mitos y realidades sobre el SIDA

Hay muchos mitos que rodean al VIH /SIDA, las cuales contribuyen a un mal entendimiento general del virus. Estos malentendidos pueden llevar a deshacer los prejuicios contra las personas con VIH, así como no saber la mejor manera de protegerse y proteger a otros. Mito: El VIH se propaga por contacto casual

Algunos creen que es posible contraer el VIH por contacto casual (abrazos, besos), por compartir un vaso con alguien, o utilizando el mismo baño o aseos .
Hecho: Vías de Transmisión

VIH sólo se transmite cuando el virus puede atravesar la barrera hematoencefálica en cantidades suficientes para provocar una infección. Vías primarias de transmisión son las relaciones sexuales sin protección, compartir agujas hipodérmicas, y de madre a hijo durante el embarazo, el parto o la lactancia materna, en el caso de los besos, no tendría que ser una persona infectada fluidos corporales presentes (El VIH no se transmite por la saliva) y la persona VIH negativa tendría que tener un roce abierto o dolor en la boca para contraer el virus
Mito:. condones aumentan el riesgo de transmisión

Algunas personas creen que, en lugar de que le protege de la infección por VIH, el uso de condones en realidad contribuye a la epidemia
Realidad:. Los condones son una barrera efectiva

Este mito se perpetúa para controlar la moral, por no presentar las personas con la información de salud objetiva. Los Centros para el Control de Enfermedades y Prevención (CDC) de que el uso correcto y consistente de los condones de látex y poliuretano reduce significativamente el riesgo de transmisión del VIH
Mito:. Las drogas han curado del VIH

Hay una creencia creciente de que el uso de medicamentos antirretrovirales ha curado ya sea VIH o hecho tan insignificante como para que ya no sea una preocupación
Realidad:. existe tratamiento, pero no hay cura

No existe una cura para el VIH, y sigue siendo un diagnóstico significativo. Aunque el uso de medicamentos antirretrovirales ha mejorado la calidad de vida de las personas con VIH y ampliado la cantidad de tiempo que pueden vivir sin síntomas, los medicamentos son caros, implican regímenes complicados y pueden causar efectos secundarios graves. Y muchas personas experimentan resistencia viral a los medicamentos, lo que puede interferir con la capacidad de los fármacos para mantener los niveles de VIH bajo control, lo que lleva a más complicaciones.