Cómo prevenir el trastorno de pánico
Medicamentos
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Reconocer los posibles síntomas de un ataque de pánico o trastorno de pánico. Si usted entiende cuáles son sus síntomas pueden indicar, es más probable que busquen ayuda antes. Los posibles síntomas de un ataque de pánico incluyen sudoración, dificultad para respirar, temblores, aumento del ritmo cardíaco, escalofríos o sofocos, hiperventilación, dolor de estómago, náuseas, dolor de pecho, problemas para tragar, opresión en la garganta, dolor de cabeza, mareos, aturdimiento y una sensación de el miedo.
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concertar una cita con su médico tan pronto como sea posible. Si se demora el tratamiento, puede experimentar síntomas de empeoramiento. Su médico descartará cualquier condición médica subyacente. Ella probablemente va a hacer esto mediante la realización de un examen físico, un examen psicológico y quizás ejecutando pruebas de sangre. Una vez que su médico le ha hecho un diagnóstico de un trastorno de pánico, que puede canalizar con un psiquiatra para su tratamiento.
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Tome cualquier medicamento que su médico le prescribe para usted. Hay varios tipos diferentes de antidepresivos o sedantes puede probar. Estos incluyen inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), los antidepresivos tricíclicos y benzodiazepinas. Es posible que deba cambiar los medicamentos varias veces para encontrar el que funcione mejor para usted. Esté al tanto de todos los posibles efectos secundarios de estos fármacos. Discuta cualquier otro problema médico que tenga, así como otros medicamentos y suplementos que esté tomando. Esto le ayudará a evitar cualquier interacción.
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Hable con un consejero o psicoterapeuta acerca de sus síntomas. Ella puede ayudarle a lidiar con sus síntomas. También puede ser capaz de ayudarle a determinar lo que puede desencadenar sus ataques de pánico. Si usted tiene un miedo específico, como por ejemplo una fobia que les causa, su consejero puede trabajar con usted para vencer ese miedo.
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Busque un grupo de apoyo a unirse para ayudar a lidiar con su enfermedad. O usted podría buscar la ayuda de un líder clerical. Además del apoyo psicológico que esto proporciona, un grupo de apoyo puede ser capaz de ayudarle a aprender el manejo del estrés y técnicas de relajación. Usted puede decidir unirse a un grupo de meditación, también.