Sobre la Muerte y Duelo
pena puede provocar muchos sentimientos diferentes, tanto inmediatamente después de la muerte de un ser querido y el paso del tiempo. Algunas de estas emociones son la negación de lo que ha sucedido, el choque que se ha producido la muerte, la ira por la pérdida y la tristeza. Estos sentimientos diferentes pueden sentirse separado o en conjunto durante el proceso de duelo.
Depresión
Las personas pueden sentirse deprimidas cuando se trata de la pérdida de un ser querido. Algunas personas también encuentran sentir culpa porque se preguntan cómo esta pérdida afectará a ellos y sus vidas individuales, en lugar de pensar en el ser querido que falleció.
Clean and Sober
algunas personas pueden considerar la necesidad de olvidarse de su dolor por recurrir al alcohol. Esta vía de alivio no debe ser explorado y consumo excesivo de alcohol debe ser evitado. Esto no sólo puede llevar a comportamientos nuevos problemas, sino que también puede conducir a la persona a una depresión más profunda que la pena solo.
No Decisiones Gran
Una persona que está de duelo generalmente no debería tomar ninguna decisión importante, por lo menos no de inmediato. Por ejemplo, la venta de una casa o de un cambio de carrera es algo que se debe posponer por un tiempo. Puede ser un plan más sano que tomar las cosas con calma, en el día a día.
Hablar de ello
Hablando con familiares u otras personas acerca de los sentimientos una persona está experimentando puede ser útil. Existen muchos grupos de apoyo para todos los tipos de pérdida de la muerte de mascotas, o relaciones, o las pérdidas personales. Si una persona prefiere un enfoque más de uno-a-uno, hay muchos profesionales que pueden hablar individualmente.
Aceptación
Una persona en duelo tiene que empezar a dejar amigos y otras relaciones de nuevo en su vida tan pronto como les sea posible. A pesar de que todavía se siente la pérdida, puede ser útil para que aventurarse socialmente con amigos. Una noche con las niñas o los niños puede ser muy saludable.
Momento de dolor
No hay límite de tiempo o calendario de duelo. Dependiendo de la persona individual, el proceso de duelo puede durar desde varios meses hasta varios años. Sin embargo, comúnmente se cree que la persona promedio puede comenzar a sentirse mejor acerca de dos meses después de la experiencia de su pérdida.