Infecciones de reemplazo de cadera
bacterias se destruyen normalmente inmediatamente por nuestro sistema inmunológico, pero una cirugía, como un reemplazo de cadera complica la respuesta normal del cuerpo, porque nuestro sistema inmunológico no puede luchar contra las bacterias que viven en los implantes. Típicamente, estos implantes están hechos de titanio, cobalto cromo, plástico o cerámica. Si no se controla, la infección resultante de un reemplazo de cadera puede causar estragos en el cuerpo.
Infecciones tardías
En raras ocasiones, una infección en el área de la cadera puede ocurrir uno o más años después de la cirugía. Por lo general, la infección se atribuye a algo que no sea el reemplazo de cadera, como la infección de garganta o cavidades en los dientes. No obstante que podría conducir a la eliminación de la articulación. Dr. E. Malcolm Downes, que ha escrito sobre el tema en The Journal of Bone y Joint Surgery, sugiere que cualquier posible infección se tratará a fondo antes de reemplazo de cadera para evitar un problema a largo plazo.
Enfermedad crónica
Hay evidencia de que las enfermedades crónicas pueden afectar el número y gravedad de las complicaciones que experimenta un individuo después de una cirugía de reemplazo de cadera. Si un paciente sufre de una enfermedad crónica como la diabetes o la artritis reumatoide existe un mayor potencial para el desarrollo de una infección.
Blood Clots
Aunque no es una infección , coágulos de sangre son un grave, pero común, complicación relacionada con el reemplazo de cadera. Normalmente, un médico prescribirá diversos anticoagulantes o coágulo que destruyen las drogas, y el paciente puede ser necesario usar medias de soporte para un periodo de tiempo.
Cambio
Menos del 2 por ciento de los pacientes desarrollan una infección después de reemplazo de cadera, y en el peor de los casos el primer implante tendría que ser eliminado y reemplazado con uno nuevo. Debido a que los materiales utilizados no son nativas del cuerpo humano, los tratamientos como los antibióticos no son siempre el 100 por ciento de efectividad.
Prevención /Solución
prevención de las infecciones de la cirugía comienza antes en la forma de la ingestión de antibióticos preoperatorios. Los pacientes se les recomienda tomar antibióticos antes del trabajo dental o cualquier otra operación en un esfuerzo para reducir al mínimo la posibilidad de padecer una infección durante o después de la cirugía. Una vez que un paciente de reemplazo de cadera es diagnosticado con una infección, una forma rigurosa de tratamiento debe ser prescrito.