¿Qué es una urografía intravenosa?
una urografía intravenosa es un examen de un médico puede llevar a cabo con el fin de descubrir el tamaño y la ubicación de los riñones y la vejiga, así como verificar los uréteres, los cálices y la pelvis para detectar anormalidades anatómicas . Un tinte o medio de contraste, se inyecta en el cuerpo. Se toman los rayos X para trazar el progreso del tinte a través de las vías urinarias, lo que permite al médico ver el sistema urinario y detectar problemas. Una urografía intravenosa a menudo se puede realizar como un procedimiento ambulatorio. Se puede realizar en adultos y niños.
Preparación
Para obtener las mejores imágenes de calidad de la urografía intravenosa, el médico puede dar un laxante a un paciente que se encuentra estreñimiento. Los adultos que se someten al examen deben ayunar durante al menos tres horas antes de que comience. Vaciar la vejiga antes de comenzar el examen es imprescindible, de lo contrario el medio de contraste puede diluir demasiado en la vejiga llena para ser útil para las imágenes.
El procedimiento
La urografía intravenosa dura alrededor de una hora para llevar a cabo. El paciente se acuesta en una sala de rayos X. El medio de contraste se inyecta en el paciente, por lo general a través del brazo. El tinte se mueve a través del torrente sanguíneo y en los riñones, donde comienza su viaje a través del sistema urinario. Un técnico en rayos X tomará radiografías durante el procedimiento, la cartografía de los órganos internos.
Posibles reacciones
Como con cualquier procedimiento médico, existen algunos riesgos a someterse a una urografía intravenosa. El colorante utilizado en el examen es por lo general a base de yodo, por lo que existe el riesgo de una reacción alérgica. Siempre que se de una inyección intravenosa, existe el peligro de que la vena puede ser dañada. Si un paciente presenta insuficiencia renal, la urografía intravenosa puede hacer que el peor fracaso de forma temporal.
Consideraciones
En el pasado, los médicos dependían de la urografía intravenosa como su método preferido para la obtención de imágenes del tracto urinario. Sigue siendo la mejor opción para un examen más detallado de los uréteres y los cálices. Para la evaluación del trauma, enfermedad poliquística del riñón, cáncer renal y otros temas, imágenes de resonancia magnética y la tomografía axial computarizada puede proporcionar información más detallada sobre el estado del sistema urinario.