Tratamiento alternativo para
La vitamina C es un posible tratamiento alternativo para la enfermedad de Alzheimer. Es un antioxidante, lo que significa que combate los radicales libres. Los radicales libres se cree que tienen un efecto negativo sobre el material genético y la composición de las células. Los daños causados por los radicales libres se cree que ayudar a conducir al desarrollo de la enfermedad de Alzheimer. La vitamina C se puede utilizar para ayudar a prevenir el daño de los radicales libres en el cerebro.
Vitamina E
Otra alternativa de tratamiento para la enfermedad de Alzheimer es la vitamina E. La vitamina E, como la vitamina C , es un antioxidante y también se piensa para proteger el cerebro contra los radicales libres. La vitamina E en dosis altas puede mejorar la función de algunos, pero no se cree que afecta a las capacidades cognitivas. Propiedades de la vitamina E pueden aumentar cuando se combina con la vitamina C. Tenga en cuenta que las grandes dosis de vitamina E pueden tener efectos secundarios y pueden interactuar con otros medicamentos, así que consulte con un médico antes de tomar.
Lemon Balm
Melisa (Melissa officinalis) se puede utilizar como una alternativa de tratamiento para la enfermedad de Alzheimer. A pesar de que no curará la enfermedad de Alzheimer, bálsamo de limón se ha utilizado con el propósito de mejorar la memoria. Se cree que el bálsamo de limón mejora la memoria mediante la unión a la acetilcolina del neurotransmisor y la mejora de la actividad de la misma. La acetilcolina ayuda con el aprendizaje y la memoria y también envía mensajes de los nervios motores a los músculos. Se cree toronjil para mejorar la capacidad de aprender, retener información y recuperar la información. Melisa no tiene efectos secundarios significativos conocidos.
Ginko Biloba
Gingko biloba es otra posible alternativa de tratamiento para la enfermedad de Alzheimer que se cree para mejorar la función del cerebro. Se cree que ginko biloba es un antioxidante y un antiinflamatorio. También se pretende aumentar el flujo sanguíneo y la circulación en el cerebro. Ginko biloba también puede ayudar a detener el crecimiento de la beta-amiloide, que es una proteína que se desarrolla plagas de amiloide en los cerebros de los pacientes de Alzheimer. Los posibles efectos secundarios de ginko biloba incluyen reacciones a la anestesia y los problemas con la coagulación.