La terapia para la artritis reumatoide

La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune, lo que provoca la inflamación de las articulaciones o el tejido que rodea las articulaciones. La enfermedad es dolorosa y debilitante. Las mujeres son más susceptibles a la enfermedad que los hombres y que normalmente se produce entre las edades de 40 a 60. No hay cura para la artritis reumatoide, pero los tratamientos disponibles. Síntomas

Los signos y síntomas de la artritis reumatoide pueden variar en severidad y puede haber momentos de ausencia de síntomas. Cuando los síntomas están presentes, pueden incluir dolor en las articulaciones e inflamación, las manos hinchadas rojas, golpes firmes en la piel de los brazos se llama nódulos reumatoides, fiebre, fatiga y pérdida de peso. La artritis reumatoide temprana ataca las articulaciones más pequeñas primero, como las muñecas, los tobillos, las manos y los pies. Más tarde, la enfermedad puede progresar en sus hombros, las caderas y las rodillas.
Diagnóstico

Su médico primero le hará un examen físico para revisar sus síntomas y examinará las articulaciones afectadas por la inflamación . Los análisis de sangre y radiografías se toman para estar seguros del diagnóstico.

Medicamentos y cirugía

artritis reumatoide no tiene cura, pero los tratamientos para disminuir el inflamación están disponibles. Los medicamentos de venta sin receta como Advil y Aleve pueden reducir la inflamación en las articulaciones. Los medicamentos corticosteroides puede retrasar el daño articular y reducir el dolor. Estos medicamentos pueden hacer que usted se sienta mejor sobre el uso a corto plazo, pero a largo plazo disminuye su eficacia. Los inmunosupresores funcionan para suprimir su sistema inmune y atacan las células asociadas con la enfermedad. Inhibidores de TNF-alfa pueden reducir la inflamación en las articulaciones dolorosas y rigidez matinal. Cuando los medicamentos no ayudan, se puede considerar la cirugía. Un reemplazo total de la articulación o la reparación del tendón puede restaurar la capacidad de utilizar la articulación nuevamente.
Remedios caseros

Aplicar compresas de agua caliente y fría en las articulaciones afectadas. Las almohadillas térmicas, duchas de hidromasaje y jacuzzis dan alivio a dolor en las articulaciones. Frío adormece y embota el dolor y reduce los espasmos musculares. Ejercicio de bajo impacto puede fortalecer los músculos que rodean las articulaciones. Caminar y aeróbic acuático son maneras fáciles de comenzar. Hable primero cualquier rutina de ejercicio con su médico. Reduzca el estrés en su vida mediante la relajación de la meditación o respiración cintas. Contactar con la Arthritis Foundation para encontrar grupos de apoyo en su área.