Las actividades de terapia ocupacional para la enfermedad arterial coronaria
Un paciente con enfermedad de la arteria coronaria que se ha sometido a un procedimiento cardiaco pueden sentirse especialmente vulnerables y temerosos de participar en tareas de la vida diaria. Incluso antiguamente tareas sencillas como ducharse o vestirse solos pueden ser actividades intimidatorias para alguien que acaba de ser sometido a un procedimiento cardiaco. Un terapeuta ocupacional enseña a los pacientes a recuperar la fuerza y la resistencia de manera segura y efectiva. Ayuda con vestidor, baño y aseo son tareas comunes de un terapeuta ocupacional ofrecerá cualquier paciente cardíaco. Por ejemplo, los pacientes a menudo se les enseña a tomar decisiones visuales, tales como los necesarios para el aseo y vestirse, antes de tomar acción física en un esfuerzo por ahorrar energía y fuerza.
Protección del Heart of
Uno de los sentimientos más intensos de un paciente con la enfermedad de la arteria coronaria puede tener es el sentimiento de vulnerabilidad. Incluso las acciones, como los estornudos o la tos puede producir una intensa ansiedad en un paciente. Los terapeutas ocupacionales muestran a los pacientes a recurrir a "almohadas del corazón" para colocar y mantener el corazón durante este tipo de acciones para ayudar a proteger las incisiones en el pecho. Los terapeutas ocupacionales también ofrecen ayuda y consejos para hacer el hospital o en el hogar más fácil de usar a un paciente cardíaco. Las actividades pueden incluir aprender a caminar con los dispositivos de adaptación para el uso de equipo de adaptación para cocinar, limpiar y realizar la higiene personal. Dichos equipos pueden incluir barras de apoyo, dispositivos de apoyo, capturadores largos y cubiertos que se adaptan a las personas con un rango limitado de movimiento, la fuerza o la capacidad de agarre.
Incrementar los niveles de habilidad diaria Búsqueda
Un terapeuta ocupacional le ayudará y fomentar un paciente con la enfermedad de la arteria coronaria en recuperación de adaptar diferentes hábitos personales a sus necesidades específicas y los niveles de resistencia. Por ejemplo, el terapeuta puede instruir al paciente en ejercicios de respiración profunda para aliviar el estrés y la ansiedad, así como mostrar al paciente cómo conservar energía y fuerza durante el proceso de curación. Estas técnicas se pueden utilizar en los cambios de estilo de vida cotidiana adoptadas por los pacientes para un beneficio óptimo en el futuro también.