Estrategias de Comunicación Inclusive
Las personas con discapacidad auditiva pueden comunicarse de varias maneras diferentes, incluyendo el lenguaje de señas, la lectura de labios y escribir notas. Pacific Lutheran University recomienda preguntar al individuo qué método de comunicación que prefiera. Si se utiliza un traductor de lenguaje de señas, asegúrese de hacer contacto visual con la persona que te estás comunicando, no el traductor. Además, tenga en consideración que el traductor puede firmar más lento de lo que hablas, para no correr la comunicación. Cuando el labio con discapacidad auditiva lee, evitar el bloqueo de la boca con las manos u otros objetos, y no masticar chicle.
Habla por deterioro Estrategias
Las personas con impedimentos del habla puede encontrar el proceso de comunicación frustrante. Con paciencia se puede ayudar a reducir la frustración. Pacific Lutheran University aconseja dar a los demás un montón de tiempo para hablar y utilizar la escucha reflexiva para asegurarse de que usted entiende lo que dice la otra persona. Escucha reflexiva implica afirmar de nuevo lo que dijo la otra persona en su respuesta. Por ejemplo, si alguien dice "no me gustó la película porque los personajes carecen de profundidad," usted podría responder: "Entonces, ¿Ha pensado los personajes podrían haber desarrollado más?"
Las personas con tecnología de asistencia
The Pacific Lutheran University señala la tecnología de asistencia, tales como bastones y sillas de ruedas, debe ser visto como una extensión de las personas que los utilizan. En lo que se refiere a la comunicación, esto significa que no se toquen dispositivo de ayuda de una persona a menos que quieras que toque a la persona. Después de todo, no lo toque aleatoriamente otra persona sin discapacidad durante la comunicación con él. La Universidad Luterana del Pacífico también recomienda evitar frases como "confinado a una silla de ruedas" y "walker restringido", ya que estos dispositivos de movilidad no deben ser vistos como confinamientos y restricciones. Por el contrario, la tecnología de asistencia habilita las personas con discapacidad para hacer más.