Signos y síntomas de cáncer Ovairian
Según la Clínica Mayo, el cáncer de ovario puede ser difícil de detectar porque los síntomas son similares a otras condiciones médicas, como problemas con la vejiga o el sistema digestivo. Las mujeres que tienen cáncer de ovario pueden experimentar una necesidad frecuente de orinar, indigestión crónica, dolor de espalda, hinchazón abdominal, estreñimiento y dolor pélvico. Otros síntomas incluyen cambios en el ciclo menstrual, pérdida de apetito y dolor durante el coito. Si estos síntomas son crónicos y se vuelven más graves, podrían ser señales de advertencia de cáncer de ovario.
Cuándo buscar ayuda médica
Dado que los síntomas de cáncer de ovario no son siempre es fácil de identificar, es importante que las mujeres prestan mucha atención a los cambios anormales en el cuerpo. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, las mujeres deben consultar a un médico si los síntomas duran varios días. Las mujeres también deben consultar a un médico si tienen sangrado vaginal anormal, especialmente si esto ocurre después de la menopausia.
Factores de Riesgo
genes pueden jugar un papel de los riesgos de una mujer. La Sociedad Americana del Cáncer afirma que las mujeres que tienen familiares que han tenido cáncer de ovario son un 15 por ciento más probabilidades de desarrollar esta condición. Según la Clínica Mayo, las mujeres que tienen una mutación genética que los hace vulnerables al cáncer de mama también son mucho más susceptibles al cáncer de ovario. Las mujeres que son obesas, infértiles o que nunca han tenido hijos también corren un mayor riesgo.
Prevención
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, hay hay métodos probados para prevenir el cáncer de ovario. Sin embargo, hay algunas cosas que las mujeres pueden hacer para reducir sus posibilidades. Esto incluye la lactancia materna, o el uso de píldoras anticonceptivas durante al menos cinco años. Además, las mujeres que han tenido sus tubos atados, que han tenido una histerectomía, o que han tenido al menos un embarazo, son menos propensas a desarrollar cáncer de ovario.
Tratamiento
Las mujeres que tienen cáncer de ovario pueden recibir tratamiento a través de la cirugía, la quimioterapia o una combinación de los dos. Según la Clínica Mayo, el objetivo de la cirugía es eliminar la mayoría del cáncer del abdomen, dejando sólo una minúscula porción del tumor. La quimioterapia a menudo comienza después de la cirugía. En los casos más graves, las mujeres recibirán una doble ronda de quimioterapia en forma de drogas intravenosas e inyecciones que van a la derecha en el abdomen.