Signos y síntomas de obstrucción carotídea
Hay varios factores que aumentan el riesgo de enfermedad de la arteria carótida en desarrollo, como el tabaquismo, el colesterol alto, el alto consumo de alcohol, la obesidad, la hipertensión arterial, la falta de ejercicio y una familia historia. Los médicos utilizan varias herramientas de diagnóstico como la ecografía Doppler, angiografía por resonancia magnética, oculopletismografía y arteriografía y angiografía por sustracción digital. Cirugía, medicamentos e intervenciones transcatéter se usan para tratar la enfermedad.
Parálisis /hormigueo
Un síntoma de obstrucción de la arteria carótida es la debilidad o parálisis, específicamente del brazo , piernas, cara o en un lado de su cuerpo. Otro síntoma es el adormecimiento de su brazo, pierna o la cara en un lado de su cuerpo. Esto se debe a la falta de flujo de sangre a esa parte del cuerpo.
Pérdida de la vista
A veces lo que empieza como una visión borrosa se convertirá rápidamente en una pérdida de la vista. La pérdida de la visión se produce en el lado donde se bloquea la arteria carótida, y el flujo sanguíneo se reduce.
Mareos
mareo, desmayo o confusión son también síntomas comunes. Esto ocurre cuando la arteria se bloquea y el cerebro no puede obtener suficiente oxígeno o de sangre, causando tal síntoma.
Dificultad para tragar
Dificultad para tragar también señala la enfermedad carotídea. Esto es causado por la presión de la arteria obstruida, ejerciendo presión sobre los nervios que permiten a uno de tragar y, en algunos casos, dañando el nervio.
Tratamiento
Carótida enfermedad de las arterias es tratado varias maneras, incluyendo medicamentos anticoagulantes como la aspirina para prevenir los coágulos de sangre. Medicamentos para reducir la presión arterial también se prescribe a menudo. La cirugía es a menudo una opción para eliminar la sección obstruida de la arteria.
Cambios en el Estilo
Después de un bloqueo de la arteria carótida, el médico puede ordenar los cambios de estilo de vida de un individuo en Además de los medicamentos. Estos cambios pueden incluir el ejercicio diario, una disminución en la ingesta de sal, la cantidad limitada de alcohol y no fumar.