¿Qué causa el GFS?

FSG (glomeruloesclerosis segmentaria y focal) es una anomalía genética que afecta glomérulos de los riñones. El tejido de la cicatriz cubre el sistema de filtración del cuerpo, y puede conducir a insuficiencia renal crónica. Causas

Las causas de la FSG son desconocidas, pero los avances en los estudios clínicos vinculan la enfermedad a nefropatía por reflujo. La nefropatía por reflujo es una condición en la que los riñones están dañados por un flujo hacia atrás de la orina en el riñón. Las válvulas que conectan el riñón con el uréter evolucionaron para mantener el flujo de orina en una sola dirección. Sin embargo, las anormalidades genéticas daño que estas válvulas, permitiendo que la orina relé de nuevo en el riñón afectado. Debido a que hay más presión contenida en la vejiga, la orina que se devuelve al riñón provoca la cicatrización después de la exposición prolongada sin tratamiento.

Otras causas de FSG implicar la longitud anormal del uréter que se extiende dentro de la vejiga. Normalmente, el uréter está enterrado bien dentro de la vejiga con una longitud programada genéticamente. Cuando las alteraciones en los túneles de la vejiga están presentes, la presión en la vejiga supera la estructura cerrada y empuja de nuevo en la orina de los riñones. Un uréter acortado también facilita los túneles abiertos para dar paso a la presión.
Síntomas

Los síntomas de la FSG se suelen atribuir a las infecciones del tracto urinario, pero las infecciones repetitivas son signos de FSG y nefropatía por reflujo. Desde FSG es una condición genética, hay una mayor posibilidad de desarrollar FSG si los padres tienen antecedentes de nefropatía por reflujo. Algunos de los síntomas clínicos comunes de FSG son sangre en orina, dolor de espalda o dolor lateral en la zona de los riñones, orina turbia y aumento de la frecuencia de la micción.
Diagnóstico

Es importante buscar tratamiento médico cuando se sospecha FSG. Si no se controla, puede conducir a una insuficiencia renal crónica. Análisis de orina, biopsias y pruebas de microscopía de inmunofluorescencia se dan generalmente a los pacientes que presentan síntomas
Tratamiento

Los tratamientos para la FSG es similar a los de las infecciones del tracto urinario:. Antibióticos, mejora de los comportamientos de dieta y suplementos como la vitamina D. La dieta juega un papel muy importante en la prevención. Exclusiones y la moderación de ciertas macromoléculas sugeridas por los médicos incluyen proteínas y lípidos (grasas). Los médicos también sugieren una ingesta baja de sal y mucha agua para limpiar el sistema.