Hernia de Disco Cuello Terapia

Aunque menos común que una hernia de disco en la zona lumbar, un disco herniado en el cuello se produce cuando los discos entre las siete vértebras fuera abultamiento o ruptura. Las hernias de disco son causadas por el desgaste porque a medida que envejecemos, nuestra columna vertebral pierden el líquido necesario ser flexible o de una lesión. Los síntomas incluyen dolor y debilidad en las extremidades. Temperatura

Aunque algunas hernias discales requieren cirugía, lo más a menudo los remedios caseros y los medicamentos pueden ayudar a tratar el problema. Durante los dos primeros días de dolor, la aplicación de compresas frías en el cuello puede ayudar a los problemas de control como espasmos musculares, inflamación y dolor al reducir el flujo de sangre a la zona. Una vez transcurridos dos días, cambie a una compresa caliente que estimulará el flujo de sangre a la zona afectada. La terapia de calor alivia los músculos y los tejidos y ayuda a tomar la sangre de las toxinas producidas por la lesión. Se recomienda aplicar calor y compresas frías durante 15 -. Para duraciones de 20 minutos
medicamentos

medicamentos como los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) son los más eficaces para controlar el dolor y la inflamación de una hernia de disco. Éstos trabajan al reducir la inflamación en la zona y permitir que los tejidos sanen. Si el dolor es severo, el médico puede prescribir un narcótico para el uso a corto plazo, pero estos pueden provocar dependencia. También beneficiosa son relajantes musculares para ayudar a la reacción del músculo del cuello calma a la lesión. Consulte con un médico antes de medicar a sí mismo por una hernia de disco.
Fisioterapia

Otro tratamiento beneficioso es la terapia física, donde se puede aprender ejercicios y estiramientos que no sólo tratar los síntomas actuales, pero ayudar a prevenir futuros discos herniados. La terapia física, que depende de la extensión y gravedad de la lesión, podría incluir estiramiento, masaje y tracción. Es importante que el médico y el terapeuta trabajan juntos para desarrollar el mejor plan para usted y su lesión. Con el tratamiento adecuado, la mayoría de las personas son libres de síntomas en sólo un poco más de un mes.