Niveles de Exposición para los tipos de amianto
Casi todo el mundo está expuesto al asbesto en algún momento de su vida, pero la mayoría de las personas no se enferman de la exposición. Existen bajos niveles de asbesto en el aire, agua y suelo. Por lo general, las personas que se enferman por el asbesto son los que están expuestos regularmente al material, como los que trabajan en la construcción, los textiles y el aislamiento. Sin embargo, la mejora de las prácticas de la industria han reducido al mínimo el riesgo de que los empleados están expuestos a altas concentraciones de asbesto.
Exposición crónica
Los que experimentan la exposición crónica al asbesto corren el riesgo de desarrollar trastornos pulmonares del cáncer, mesotelioma y no malignas. No existe una regla fija en cuanto a la cantidad de exposición al asbesto se considera crónica o demasiado, pero varios factores que determinan si la exposición afecta a una persona. La concentración, la duración, la frecuencia y el tamaño, forma y químicas maquillaje de las fibras de amianto son factores en cómo el material afecta a un individuo. Se espera que
Las fibras largas y delgadas para llegar a las regiones inferiores de los pulmones, lo cual significa que se conserva allí más tiempo y tienen un efecto más tóxico que las fibras cortas y anchas. Fibras Wide Generalmente se espera que se depositará en el tracto respiratorio superior sin alcanzar profundamente en los pulmones. Sin embargo, las fibras cortas y anchas también pueden causar problemas respiratorios, ya que puede tomar años para que las fibras de amianto para trabajar su manera de salir de los pulmones. Presencia extendida de fibras en los pulmones puede conducir a la acumulación de líquido y el desarrollo de tumores.
Fumar y la exposición al amianto
Las personas que fuman cigarrillos y son también expuestos al asbesto tienen un riesgo mayor de desarrollar cáncer de pulmón que los que no fuman. Aunque el tabaquismo ya potencialmente conduce al cáncer de pulmón, los estudios demuestran que el hábito, cuando se combina con la exposición al asbesto, aumenta este riesgo de manera significativa. Esto es por qué las personas que sospechan que han sido expuestos a niveles peligrosos de amianto deben dejar de fumar para evitar el alto riesgo de los tumores de pulmón y el cáncer.