Los síntomas de la culebrilla Recurrencia
Culebrilla recidivas suelen ocurrir en adultos. Una característica común del herpes es la que ocurre normalmente en un solo lado del cuerpo. Durante un brote, hay algunos síntomas comunes que ocurren a la mayoría de los pacientes. Dolor súbito es común, que es la primera señal de alerta de un brote. La siguiente etapa pone de manifiesto los síntomas del virus activos. Para algunos pacientes, una tercera etapa también se produce llama neuralgia postherpética. Un pequeño porcentaje de personas que también tienen brotes que traen dolor y sin la presencia de una erupción.
Prodrome
Prodrome es la primera etapa de un brote de herpes, y es caracterizada por síntomas de dolor en el lugar de donde se desarrolla el sarpullido. El dolor es agudo, penetrante sensación aguda que es similar a una descarga eléctrica. De vez en cuando, picazón o enrojecimiento en el dolor, y algunos pacientes experimentan dolores musculares. Los síntomas suelen durar hasta cinco días antes de que aparezca el dolor de la erupción. Sin embargo, algunos pacientes experimentan dolor durante meses.
Culebrilla activo
Tras el dolor, los síntomas de una erupción se desarrollan en la zona. Normalmente, se producen brotes de herpes zoster en el pecho, cara o espalda. Si se desarrolla un sarpullido en la cara, se puede propagar a los ojos causando daños. Las ampollas se forman, que son similares a la varicela, pero con el tiempo se curan después de varios días. El dolor es también un síntoma común durante esta etapa de la culebrilla.
Neuralgia postherpética
La neuralgia postherpética es un síntoma que se presenta en algunos pacientes con herpes zóster. Se caracteriza por dolor continuo incluso después de que cese el sarpullido. Se presenta en aproximadamente 10 a 20 por ciento de los pacientes con herpes zóster. El dolor puede durar varios meses.
Herpes sin zóster
herpes sin zóster es una condición en la que el dolor se desarrolla durante un brote de herpes zóster recurrencia, pero no existe erupción cutánea. Es común en los ancianos, y también tiene síntomas tales como vómitos, dolor de cabeza, fiebre y escalofríos. Uno de los síntomas más comunes de esta etapa es la parálisis de Bell, que hace que la cara se convierta en parálisis en un lado.