Signos y síntomas de una próstata inflamada
Este es el menos común de los cuatro tipos, y la más fácil de diagnosticar y tratar. Se caracteriza por escalofríos, fiebre, dolor en la espalda baja y el área genital, dolor de cuerpo y dolor, ardor al orinar. También se caracteriza por ser una infección aguda del tracto urinario y por lo general se asocia a factores de riesgo como la obstrucción del tracto urinario inferior.
Crónica bacteriana
Esta variedad es un poco raro. Los síntomas incluyen dolor en la espalda baja y dolor testicular y puede conducir a dolor leve al orinar o ganas frecuentes de ir si se propaga a la vejiga. Se caracteriza por infecciones recurrentes del tracto urinario, con la participación de un solo organismo en el líquido prostático.
No bacteriana
Esta es la más común y la menos entendida forma. Los síntomas van y vienen sin avisar, pero es una enfermedad dolorosa, crónica que se encuentra en los hombres de todas las edades. No microorganismo infeccioso se encuentra en la mayoría de orina u otros fluidos, pero el semen y otros fluidos de la próstata contiene células que se producen para combatir infecciones. Por lo general, esta forma se diagnostica después de un cultivo de orina o cultivo de la secreción de la próstata no produce un resultado positivo, pero hay síntomas presentes sin un organismo bacteriano que las causa.
Prostatodinia
similares a la cepa bacteriana con respecto a los síntomas y la edad de los pacientes. Los mismos que combaten la infección las células blancas de la sangre se encuentran en la orina y los líquidos. Esto también se conoce como síndrome de dolor pélvico crónico y puede requerir diferentes tratamientos debido a los conductos prostáticos se han convertido en enchufado y son a menudo la razón para el dolor. Las opciones de tratamiento como el masaje prostático terapéutico y la eyaculación terapéutico pueden ser necesarios para esta condición dolorosa.
Opciones de tratamiento
Normalmente, se requieren antibióticos por un mínimo de 14 días, casos de cepas bacterianas agudas. Otras variedades pueden depender de la causa de la infección para las opciones de tratamiento. Prostatitis aguda, crónica y no bacteriana son enfermedades inflamatorias e infecciosas que responden a los tratamientos naturales, incluyendo los suplementos y los cambios de estilo de vida. Los tratamientos naturales incluyen las dietas y los alimentos ricos en antioxidantes para estimular el sistema inmunológico. Los alimentos que son buenos para la salud de la próstata son: té negro, té verde, vino tinto, cerezas, frambuesas, uvas rojas, cítricos, cebolla y brócoli. Vegetales de hojas verdes son naturalmente ricos en quercetina. Tomates, sandías, pomelos rojos, papaya y frutos rojos son una gran fuente de licopeno, que también ayuda a apoyar la salud de próstata.