Efectos del Alcoholismo
alcoholismo trae consigo una amplia gama de efectos mentales. Una persona que sufre de esta condición no puede recordar hablar con alguien u olvidar sus citas. Se puede perder interés en actividades que antes eran muy agradable. Un alcohólico puede llegar a ser molesto e irritable cuando sus hábitos de consumo son cuestionadas y se vuelven cada vez más enojado cuando se interrumpe la rutina de beber. El alcoholismo está estrechamente relacionado con las condiciones mentales como la depresión, el trastorno de baja autoestima bipolar, problemas de sueño y los problemas relacionados con la ansiedad. Las células cerebrales pueden morir por los efectos del alcohol, con una condición llamada "cerebro húmedo" el producto final de alcoholismo para algunas personas. Pérdida de memoria severa y la disminución gradual de los procesos mentales pueden conducir a un deterioro grave de este efecto particular de alcoholismo.
Efectos sociales
Las consecuencias del alcoholismo en la escala social son enormes. El alcoholismo contribuye a casi la mitad de todas las muertes relacionadas con el tráfico en los Estados Unidos de acuerdo con la Clínica Mayo. La pérdida de la vida, la pérdida de la libertad, o por lo menos la pérdida de los privilegios de conducir se derivan de accidentes de tráfico relacionados con el alcoholismo y las detenciones. Estos problemas jurídicos son bastante malas, pero el alcoholismo puede causar una persona a perder un trabajo, haciéndolo dependiente de los demás lo que se traduce en las relaciones fracturadas. El alcoholismo puede precipitar abuso en las relaciones, con esta violencia, que conduce a la separación de un ser querido. El suicidio es también un subproducto del alcoholismo en muchos casos.
Afectar al hígado
consumo excesivo de alcohol es una causa importante de enfermedades hepáticas graves. La hepatitis alcohólica y cirrosis son las dos condiciones que provocan que el hígado pierde su capacidad de funcionar adecuadamente. Los síntomas, como pérdida del apetito, dolor en la región abdominal, se pueden presentar náuseas, vómitos, ictericia, fiebre y pérdida de capacidades mentales. La hepatitis alcohólica inflama el hígado y puede conducir a la cirrosis, una enfermedad en la que el hígado está tan marcado que no hay suficiente tejido sano que queda en el órgano para permitir que funcione correctamente. Ambas son enfermedades potencialmente fatales.
Efectos sobre Órganos
Cuando una persona es alcohólica es vulnerable a las enfermedades gastrointestinales. El alcohol puede inflamar el revestimiento del estómago y dificultar la absorción de ciertas vitaminas. El páncreas se puede dañar extensivamente por el alcoholismo, lo que resulta en un problema importante ya que produce hormonas que son vitales para la digestión y el metabolismo. Los diabéticos con problemas con el alcohol corren el riesgo de hipoglucemia porque el alcohol afecta la liberación de glucosa del hígado. Beber en exceso puede provocar presión arterial alta y dañar el sistema cardiovascular, ictus precipitantes o insuficiencia cardíaca.
Otros efectos físicos
alcoholismo en los hombres se ha demostrado que el resultado en la disfunción eréctil. En las mujeres que puede interferir con el ciclo menstrual. Las mujeres embarazadas que beben poner a sus hijos por nacer en peligro de una condición llamada síndrome de alcoholismo fetal, que causa defectos de nacimiento y problemas de desarrollo. Adelgazamiento de los huesos que forman las fracturas de huesos más probable que ocurra se han relacionado con el alcoholismo. Enfermedades neurológicas, como la demencia y la sensación de hormigueo en los pies y las manos, son provocados por el alcoholismo en algunos individuos. El riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer se ve reforzada por el alcoholismo, el cáncer de la boca, el hígado y el colon entre las personas que pueden ser el resultado de la enfermedad.