Cómo tratar los cambios de humor Premenopausia
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Únase a un grupo de apoyo de la premenopausia. Comparte tus frustraciones y preguntas con otras mujeres en su misma situación. Puede ser terapéutico para saber que no eres la primera mujer que luchar estos cambios de humor. A pesar de las palabras tranquilizadoras de su médico puede que útil, no hay nada como un relato de primera mano de un compañero de confianza. Discuta los sentimientos con respecto a su imagen corporal y buscan consejos sobre cómo lidiar con la vida de estrés. Elija entre los grupos locales y en línea para adaptarlo mejor a las necesidades personales.
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Participar en el ejercicio regular de los cambios de humor de batalla. Pídale a su médico que le recomiende un régimen de entrenamiento que no contribuye a la disminución de la densidad ósea. Esto es especialmente importante, ya que las mujeres en premenopuase ya experimentan este efecto secundario. Yoga se recomienda a menudo, debido a su baja intensidad y los efectos calmantes. Pídale a un amigo que le acompañe al gimnasio para una mayor sujeción.
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Pruebe los remedios naturales para hacer frente a los cambios de humor. Hierba de San Juan se recomienda a menudo para tratar la ansiedad y los cambios de humor. Participar en una afición puede ayudarle a concentrarse en algo más que su estado de ánimo en declive. Cambiar su dieta puede ayudar a reducir la intensidad y frecuencia de sus cambios de humor. Evalúe su estilo de vida para identificar factores desencadenantes de estrés.
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Tomar medicamentos antidepresivos. Los medicamentos como Zoloft dar muchas mujeres el alivio de los cambios de humor severos. Mientras que la medicación con receta no debe ser un primer recurso, sino que también no se debe descartar por completo como una opción de tratamiento. Discuta cualquier aversión a la terapia antidepresiva con su médico.
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considerar la terapia de reemplazo hormonal. La disminución de los niveles de progesterona pueden ser los culpables. Algunos médicos incluso recomiendan píldoras anticonceptivas de dosis baja para darle a su niveles de estrógeno y la hormona progestina un impulso. Trabaje con su médico para encontrar la mejor combinación para su cuerpo. Manténgase honesto acerca de su historial médico y hábitos personales, ya que este tipo de terapia se asocia con un mayor riesgo de cáncer de mama y de episodios cardiovasculares.