Las pruebas de purinas
Hay tres principales pruebas para la detección de purines en los seres humanos: la prueba de Kossel, prueba Hoppe-Seyler y prueba Weidel Hugo. Prueba de Kossel se utiliza para detectar la presencia de hipoxantina. En esta prueba una pequeña cantidad de orina se trata con zinc y ácido clorhídrico junto con el exceso de hidróxido de sodio. Si la solución se vuelve de color rojo, se confirma la presencia de hipoxantina.
Hoppe-Seyler Prueba
prueba Hoppe-Seyler se emplea para detectar la xantina. En esta prueba, la orina se concentra y el residuo se obtiene para el ensayo con la ayuda de un alcohol fuerte. A continuación, la mezcla se evaporó y se precipitó con acetato de plomo y amoníaco. Este precipitado se trata con alcohol de ebullición, y después de enfriar se precipita con éter y la cal y el cloro se añade a la misma. Si la mezcla se vuelve de color verde oscuro se confirma, la presencia de xantina.
Hugo Weidel Prueba
Hugo Weidel también se utiliza para detectar la presencia de xantina. La sustancia (orina) se baña con agua de cloro y ácido nítrico. Luego, después de evaporar, que está expuesto a gas de amoniaco. Si la sustancia se vuelve de color púrpura o rosa, xantina está presente.
Funciones de Purines
Hay dos importantes funciones celulares de purines en los seres humanos. En primer lugar, a lo largo de purinas con pirimidinas (cytosyine, timina y uracilo) ayudan en la síntesis de ADN y ARN. Las bases nitrogenadas de purinas están unidos por enlaces fosfodiéster y están incorporados en las crecientes cadenas de la nueva ADN o ARN durante su síntesis. En segundo lugar, purinas también ayudan en el almacenamiento de energía en el corto plazo. La forma general de la energía almacenada por los purines es el trifosfato de adenosina o ATP.
Efectos nocivos
ácido úrico se produce como resultado de la descomposición de las purinas. En general, el ácido úrico se utiliza para varios procesos metabólicos en el cuerpo, mientras que el exceso se excreta a través de la micción. Sin embargo, en personas cuya dieta es muy rica en proteínas, los niveles de ácido úrico superiores a los límites de la normalidad, interrumpiendo así el metabolismo de las purinas. Esta acumulación de ácido úrico en las articulaciones y los tendones puede causar gota artrítica.