¿Cómo puede un supuesto quiropráctico llamarse doctor cuando nunca ha aprobado ninguno de los exámenes nacionales y estatales?

Los quiroprácticos no son médicos, sino doctores en quiropráctica. Tienen una formación académica y un ámbito de práctica diferentes a los de los médicos.

Para convertirse en quiropráctico, una persona debe completar una licenciatura y luego un programa universitario de quiropráctica de cuatro años. Los programas universitarios de quiropráctica están acreditados por el Consejo de Educación Quiropráctica (CCE).

Las universidades de quiropráctica enseñan a los estudiantes sobre la estructura del cuerpo humano, el sistema nervioso y las técnicas quiroprácticas. También aprenden sobre la nutrición, el ejercicio y los factores del estilo de vida que pueden afectar la salud de la columna.

Después de completar la universidad de quiropráctica, los estudiantes deben aprobar los exámenes de la Junta Nacional de Examinadores de Quiropráctica (NBCE) para obtener la licencia para practicar la quiropráctica. Los exámenes NBCE cubren temas como anatomía, fisiología, diagnóstico y tratamiento de trastornos de la columna.

Una vez autorizados, los quiroprácticos pueden abrir sus propios consultorios o trabajar en clínicas u hospitales quiroprácticos. Utilizan ajustes de la columna, terapia de masajes y otras técnicas para ayudar a los pacientes a aliviar el dolor y mejorar su salud general.

Los quiroprácticos no son médicos, pero son profesionales de la salud autorizados que pueden brindar atención segura y eficaz para muchos tipos de afecciones de salud.