¿De dónde proviene la información sensorial?
La información sensorial proviene del entorno y del interior del cuerpo. Los aportes ambientales incluyen estímulos como la luz, el sonido, el tacto y el olfato. Los aportes internos incluyen estímulos como el hambre, la sed y el dolor.
La información sensorial es detectada por receptores sensoriales, que son células u órganos especializados que convierten los estímulos en señales eléctricas que el cerebro puede interpretar. Los receptores sensoriales se encuentran en varias partes del cuerpo, incluida la piel, los ojos, los oídos, la nariz y la lengua.
El cerebro procesa información sensorial para crear percepciones del mundo que nos rodea. Estas percepciones se utilizan para guiar nuestro comportamiento, tomar decisiones y aprender cosas nuevas.