¿Qué es la terapia de conversión?

Terapia de conversión Es una práctica pseudocientífica que busca cambiar la orientación sexual o identidad de género de un individuo. Se basa en la premisa falsa de que la homosexualidad es una enfermedad o trastorno mental que puede "curarse". No existe evidencia científica creíble que respalde el uso de la terapia de conversión y ha sido ampliamente condenada por las principales organizaciones médicas y de salud mental.

La terapia de conversión puede adoptar muchas formas, pero normalmente implica una combinación de psicoterapia, asesoramiento y técnicas de modificación del comportamiento. Los terapeutas pueden intentar persuadir a las personas de que su atracción hacia el mismo sexo o su identidad de género son incorrectas o pecaminosas. También pueden presionar a las personas para que cambien su comportamiento, por ejemplo, evitando el contacto con personas del mismo sexo o vistiéndose de una manera más acorde con su género.

La terapia de conversión puede ser increíblemente dañina, tanto psicológica como físicamente. Puede provocar depresión, ansiedad, odio a uno mismo y pensamientos suicidas. También puede hacer que las personas pierdan el sentido de sí mismos, sus redes de apoyo y su capacidad de vivir auténticamente.

En los últimos años, ha habido un movimiento creciente para prohibir la terapia de conversión. Varios estados y ciudades de Estados Unidos han aprobado leyes que prohíben esta práctica y hay leyes similares pendientes en otras jurisdicciones. En 2018, la Asociación Estadounidense de Psicología pidió la prohibición a nivel nacional de la terapia de conversión.

La terapia de conversión es una práctica peligrosa y dañina que no tiene cabida en nuestra sociedad. Es esencial que sigamos trabajando para poner fin a la terapia de conversión y proteger los derechos de todas las personas a vivir auténticamente y libres de discriminación.