El tubo con tapa de lavanda contiene EDTA (ácido etilendiaminotetraacético) como anticoagulante. Se utiliza comúnmente para pruebas hematológicas, como hemogramas completos (CBC), recuentos diferenciales y frotis de sangre. El EDTA evita que la sangre se coagule al unirse a los iones de calcio, que son necesarios para el proceso de coagulación. El tubo con tapa de lavanda puede conservar la sangre hasta por 24 horas a temperatura ambiente o hasta por 48 horas si está refrigerada. Sin embargo, generalmente se recomienda procesar la muestra de sangre lo antes posible para garantizar resultados precisos.