¿Por qué no hay glucosa en la orina?

La glucosa se reabsorbe activamente en el túbulo contorneado proximal renal y en las asas de Henle mediante un proceso llamado reabsorción de glucosa. Los transportadores de glucosa SGLT2 (transportador 2 de sodio-glucosa) y GLUT1 (transportador 1 de glucosa) son responsables de esta reabsorción. SGLT2 se encuentra en la membrana luminal de las células del túbulo proximal y GLUT1 se encuentra en la membrana basolateral. La glucosa se une a SGLT2 y se transporta a las células del túbulo proximal, donde luego se une a GLUT1 y se transporta al torrente sanguíneo. Este proceso asegura que la glucosa se reabsorba nuevamente en el torrente sanguíneo y no se pierda en la orina.

En personas sanas, el proceso de reabsorción es muy eficaz y no hay cantidades significativas de glucosa en la orina. Sin embargo, en determinadas afecciones, como la diabetes mellitus, la reabsorción de glucosa puede verse alterada, dando lugar a la presencia de glucosa en la orina, condición conocida como glucosuria.